Cesáreo González, el hombre que reinventó a la gran Lola Flores
El productor Cesáreo González comenzó su carrera en el cine por mera casualidad. Eventualmente, terminó contratando a algunos de los más grandes talentos de España.
Cuando la cantante Lola Flores fue de gira por primera vez en América, volvió totalmente cambiada. Rodeada de secretarios, cubierta con un exquisito abrigo de visón, y mucho más delgada, lucía un estilo más "americano" y estilizado.
El responsable de esta transformación fue nada más y nada menos que Cesáreo González. El magnate del cine español impulsó la carrera de Lola y de muchos otros famosos en la España de la posguerra.
ORÍGENES
González nació en el año 1903, en Vigo. Su padre, Claudio, era un afilador, mientras que su madre, Celsa, era ama de casa. De los cinco hijos de la pareja, Cesáreo era el tercero. Su madre quería que fuese sacerdote. Para evitar el seminario, Cesáreo huyó a Cuba como polizón. Allí pasó muchas dificultades.
Vivió en la periferia de la criminalidad. Fue rescatado por David, un hermano de su madre y su futuro suegro, quien vivía en México y le tendió una mano. Se casó con su prima hermana, María Ángeles, en 1929, y se mudaron de vuelta a Vigo en 1931. Cesáreo trabajó en una agencia publicidad para el Banco Vizcaya y Citroën.
Sede del Banco Bilbao Vizcaya Argentaria (BBVA) en Madrid en 2002. | Foto: Getty Images
TALENTO COMERCIAL
Con el tiempo, Cesáreo descubrió su talento para los negocios. Su éxito profesional en su trabajo como publicista le permitió conseguir una cómoda posición económica y rodearse de lujos. A pesar de su falta de educación formal, Cesáreo tenía don de gentes.
Sin embargo, el éxito y los lujos no lograron hacer calar el gusto por la cultura en Cesáreo. Sus amigos siempre comentaron que a pesar de su habilidad y capacidad, no era para nada un hombre de gustos refinados. De hecho, su afición por las apuestas sería responsable de su inicio en la industria del cine.
PRODUCTOR DE CINE
En 1940, para salir de una deuda por una apuesta, Cesáreo invirtió 40.000 pesetas en una producción, 'El famoso Carballeira'. Su primera experiencia en la industria fue un éxito, y al poco tiempo abrió su compañía, Suevia Films. En cuestión de una década, sería una de las productoras más grandes de España.
Cesáreo fue responsable de contratar personalmente a muchos jóvenes talentos que terminaron convirtiéndose en leyendas, como Lola Flores, Pepe Iglesias, y Joselito, entre otros. La firma del contrato entre Lola Flores y Suevia (por 5.000.000 de pesetas) fue un evento por todo lo alto.
María Félix en rodaje de la película de Suevia Films, 'La Corona Negra', en España en 1951. | Foto: Getty Images
MAGNATE
La visión de González siempre fue crear un sistema de estrellas en su estudio, con proyección nacional e internacional. Tuvo éxito en su cometido por más de dos décadas, produciendo más de un centenar de películas en pleno franquismo.
Sus contactos oficiales y su amistad con figuras poderosas, como Manuel Fraga, le permitieron prosperar en la industria. Finalmente, en 1968, Cesáreo falleció, poco después de haber conseguido un contrato para cuatro películas con el director Luis García Berlanga. Sus restos yacen en el cementerio de Pereiró, en su ciudad natal.
La carrera de Lola Flores fue impulsada por Cesáreo para llegar a nuevas alturas. Pero González no es el único responsable del ascenso meteórico de la fama de la bailaora.
Lola siempre fue una mujer atrevida, dispuesta a hacer lo necesario para dejar sin palabras a su audiencia. Como aquella vez, en 1983, cuando su torso desnudo ilustró una polémica portada.