Distancia y silencio entre dos de las mujeres más importantes de Pedro Carrasco 20 años después de su muerte

La muerte del boxeador español dejó una amarga e imborrable huella en la familia y a pesar de que han pasado dos décadas, hay cosas que el tiempo no ha borrado.

Distancia y silencio es lo que existe entre las dos mujeres más importantes de Pedro Carrasco, cuando han transcurrido 20 años desde su muerte.

Rocío Carrasco y Raquel Mosquera enterraron su nombre en lo más profundo de su ser, tras aquel ataque al corazón que le robó la vida al protagonista de ‘El marino de los puños de oro’.

LA HIJA Y LA VIUDA

La hija y la viuda del púgil decidieron, por cuenta propia, no hablar del importante hombre para ambas. El dolor parece haber quedado intacto en su interior, sin importar los abriles transcurridos.

Raquel ha mantenido distancia con los medios. Ella prefirió alejarse por completo y sufrir su pérdida desaparecida del foco mediático.

Rocío, la hija que el boxeador tuvo con Rocío Jurado, se cerró como un bunker. No habla de su vida con la prensa y lo poco que sale a la luz sobre sus temas privados es a través de demandas.

Incluso levantó cuatro juicios en contra de Raquel, a pesar de la buena relación que tuvieron durante los años de matrimonio que la peluquera tuvo con el luchador.

EN SEGUNDO PLANO

En la existencia de su hija parece que el nombre de Pedro Carrasco, junto a su recuerdo, quedó en segundo plano. Veinte años después de haberle dicho adiós, la exesposa de Antonio David Flores continúa apareciendo en los titulares, pero no precisamente por su vínculo con el famoso boxeador español.

Es por su relación familiar, o, mejor dicho, por su nula relación y conflictos personales con sus hijos y el que fue su marido, que su nombre ha sonado constantemente en los medios.

En el presente, Rocío se convirtió en colaboradora de televisión, sin embargo, los recuerdos sobre su padre o la mención de su nombre siguen estando enterrados en lo profundo de su ser. Sobre aquella tragedia que marcó su vida un 27 de enero, nada dice ni comenta.

CON SU SUEÑO ROTO

Por su parte, Raquel Mosquera perdió una importante parte de su corazón el día que llegó a casa y vio el cuerpo sin vida de su marido.

Esa imagen quedó grabada en la mente de la peluquera que vio su sueño roto de tener un hijo con el boxeador al darse cuenta de que su esposo había cerrado los ojos para siempre.

Cinco años tenían casados. Él era el hombre más importante en su vida. Pero al igual que Rocío, Raquel prefirió enterrar el recuerdo de Pedro y no hacer público su dolor. No habla sobre él ni ha hecho ningún tipo de declaración en la que lo nombre.

Mosquera se volvió a casar con un hombre al que llaman Isi, con quien tiene un hijo. En la actualidad, la viuda de Carrasco está enfocada en su salón de belleza y siguen manteniendo distancia con los medios, dejando solo en su recuerdo el nombre del que fue su gran amor.

SOBRE LA MUERTE DEL BOXEADOR

Pedro Carrasco murió producto de una parada cardiovascular el 27 de enero de 2001 a los 57 años. El suceso ocurrió en su casa en Madrid, lugar donde fue hallado sin vida por Raquel, quien en ese entonces tenía 32 años.

Pedro Carrasco fue uno de los hombres con mayor fama en España entre los años 60 y 70. Debutó en Italia en 1962 y hasta que se retiró en 1972 fue una estrella del cuadrilátero.

Los restos del aclamado boxeador fueron enterrados en el panteón familiar Carrasco-García, en el cementerio madrileño de Carabanchel.