Charo Vega habla de sus adicciones y cómo la ayudó Isabel Pantoja: "La veía sufrir por mí"
La amiga de Isabel Pantoja, Lolita Flores y Carmina Ordóñez se quedó con el corazón de la audiencia, tras someterse al polígrafo en 'Sálvame Deluxe'.
Charo Vega se sinceró sobre varios temas muy personales en el programa. Entre ellos, uno de los momentos más difíciles de su vida.
Ella tuvo problemas con las bebidas alcohólicas y el consumo de sustancias psicoactivas. Fue Isabel Pantoja quien se mantuvo a su lado en esa etapa.
Charo Vega en el desfile de Francis Montesinos durante la Cibeles Madrid Fashion Week A / W 2011 el 19 de febrero de 2011 en Madrid, España. | Foto: Getty Images
De acuerdo con las declaraciones de Charo, la tonadillera estuvo muy pendiente de su evolución mientras se encontraba hospitalizada.
"Ella me ponía la bandeja de comida y yo le hablaba de mi problema. La veía sufrir por mí", explicó.
Además, afirmó que la cantante solía llamar a su hija para preguntarle cómo estaba ella. Al hospital ingresaba de noche para evitar que la vieran llegar.
Charo Vega afirmó que estuvo "tres años acostada" por la depresión que le generó el consumo de bebidas y sustancias. En la actualidad todavía tiene que tomar antidepresivos, pues los médicos se niegan a suspender el tratamiento.
La artista aseguró que ahora se encuentra bien, pero tiene claro que si hubiera tardado más tiempo en pedir ayuda el desenlace hubiera sido fatal.
Ella lamenta la forma como el alcohol la alejó de su familia y relata que sus hijos hacían guardia en su casa para controlar sus salidas a las fiestas.
Charo afirma que su problema de adicción inició a los 45 años, en los que vivió momentos muy complicados como llegar a escuchar voces o sentir que se ponía "loquita".
“No sabía ni qué hacía ni qué hora era y ni comía. Lo mejor es reírse, estar sano y levantarte prontito para andar 5 kilómetros", dijo.
La cantante tocó fondo cuando empezó a sufrir un problema de salud y tenía la sensación de que se moriría por las taquicardias. Entonces, su hermano le dijo que debía internarse en una clínica.
Fue un proceso de recuperación muy duro en el que no solo sufrieron Charo e Isabel Pantoja, sino su otra gran amiga, Lolita Flores, quien no podía ni ir a verla al hospital.