Erik Rubín llama "bizcochito" a Salma Hayek y revela que tuvieron un amorío de una noche
Los romances del cantante antes de que se casara con Andrea Legarreta fueron famosos. De hecho, recientemente se animó a confesar uno que pocos conocían.
Erik Rubín estaba de copiloto del famoso Youtuber "El Escorpión Dorado", cuando decidió revelar antes los seguidores del canal con quién compartió en el pasado un encuentro furtivo.
El artista afirmó que un día en Estados Unidos le "cayó un bizcochito muy famoso", que en la actualidad se encuentra en la cima de su carrera, casada y con una hija preciosa.
Se trata nada más y nada menos que de la actriz internacional Salma Hayek, a quien conoció en Los Ángeles. Según cuenta Rubín, ella se encontraba en busca de oportunidades en el país norteamericano y él estaba desarrollando algunos proyectos musicales allí.
"Además fue un amorío muy bonito de realmente una noche, ella no tenía compromisos ni yo tampoco. Salma [Hayek] es increíble. La quiero, la adoro y nunca más la volví a ver", contó.
Como era de esperarse, la confesión del artista generó diversas reacciones entre sus fanáticos, quienes no dudaron en ir a la sección de comentarios para decir que esta información no sería del agrado de su esposa, Andrea Legarreta.
Cabe anotar que ese no es el único amorío que se anotó Erik en su juventud, quien también tuvo acercamientos románticos con otras famosas como Angélica Rivera, Paulina Rubio, Thalía y Alejandra Guzmán.
Sin embargo, reconoce que en cuanto se encontró a Legarreta sus prioridades cambiaron. Fue un amor profundo y a primera vista.
"Me di cuenta de que no me iba a encontrar con nadie más; que [Andrea Legarreta] era una persona transparente porque además me contó toda su vida, se abrió de capa conmigo", dijo.
Asimismo, el cantante comentó que quería proponerle matrimonio a los tres meses, pero todavía no tenía el anillo. Al final, la petición vino seis meses después de estar saliendo y el resto es historia.
En la actualidad, Erik Rubín y Andrea Legarreta conforman uno de los matrimonios más sólidos de la farándula mexicana y son padres de dos niñas, Mía y Nina.