Cómo afecta la pandemia a los niños: opinión de una psicóloga

La realidad que hemos vivido durante el último año ha afectado la vida de todos los humanos. El aislamiento nos tomó por sorpresa y nos dejó una lección imborrable. ¿Qué quedará para los más pequeños de la casa?

Los niños también han debido modificar su rutina, cambiar el contacto con sus amigos y estar expuestos a la sobreinformación del virus. Una razón por la que dos psicólogas y una psicopedagoga conversaron con la revista digital ¡Hola! acerca del impacto de la pandemia en los chicos.

Las especialistas revelaron importantes detalles sobre las consecuencias del aislamiento en los consentidos de la casa.

ELLOS TAMBIÉN SIENTEN

La pandemia no solo ha afectado la vida de los adultos, también ha hecho lo suyo en los más pequeños de la casa. Los niños han estado en contacto con el torbellino de noticias que día tras día se hace un espacio en los hogares de todas las familias.

María Guerrero, psicóloga, María Álvarez, especialista en pedagogía y Amaia Prado son las tres expertas que explicaron a la revista digital cómo afecta la pandemia a los niños y cómo ayudarlos.

UN REMOLINO DE EMOCIONES

La psicóloga María Guerrero contó que cada vez es más frecuente recibir en su consultorio a chicos con una alteración del ánimo. De acuerdo con la experta, los pacientes de edades tempranas que asisten a terapia tienen las emociones más intensas y menos habilidades para gestionarlas.

"Tienen más agresividad, mal humor, alteraciones del sueño, insomnio, cansancio crónico y una peor gestión de las emociones”, expresó la especialista en salud mental.

DEPENDIENDO DEL ENTORNO

Sin embargo, la relación familiar también ejerce una función muy importante en la capacidad de los chicos para enfrentar sus emociones. Por eso la maestra especialista en Pedagogía Terapéutica de la enseñanza pública de Madrid María Jesús Álvarez aseguró que los casos cambian dependiendo del núcleo familiar.

“No es lo mismo el coronavirus en una familia sin contagios que en una que ha tenido disgustos”, dijo la maestra psicopedagoga.

Y SIN ARMAS PARA ENFRENTARLAS

Para Amaia Prado, psicóloga del Colegio de Psicólogos de Madrid, los casos no han sido diferentes. Los pequeños se encuentran ante una situación que ha detonado todas sus emociones y se han encontrado sin herramientas para gestionarlas.

“Han tenido miedos, incertidumbres, ansiedad, falta de atención y, sobre todo, aburrimiento”, explicó la experta para quien esta situación puede tener consecuencias más graves.

LAS SECUELAS

El cóctel de emociones sumado al aislamiento de las relaciones humanas, y posteriormente, el aumento de la tecnología, puede causar que los jóvenes tengan más problemas para prestar atención.

La atención de los jóvenes se encuentra mayormente en los videojuegos o en las pantallas de sus aparatos digitales, pero el contacto con amigos ha quedado en un segundo plano. Mientras tanto, María asegura que una de las secuelas que más ha visto en su consultorio es la baja seguridad de los chicos.

Todos los pequeños son diferentes. Algunos quizá reaccionarán de forma paciente, pero el encierro es un arma muy afilada que roza con fuerza su salud física y mental.

El miedo y la inseguridad pueden convertirse en diagnósticos más graves, como cuadros depresivos o agorafobia, en los pacientes más chicos que ya presentaban algunas deficiencias en su carácter.

¿QUIÉN PODRÍA JUZGARLOS?

Si enfrentar las emociones es una tarea cuesta arriba para muchos adultos, cómo será para esos seres que recién empiezan a aprender habilidades sociales y a enfrentar la vida. Estar expuestos a tantas noticias genera un choque en su psiquis.

Las especialistas no se han quedado atrás compartiendo algunos consejos para ayudar a los más chicos y disminuir un poco el impacto que han tenido durante los últimos meses. Para la psicóloga del Colegio de Psicólogos de Madrid, es importante que los padres sean muy comprensivos con sus hijos.

Es necesario que les hagan sentir que todo irá bien. Además, para María también es importante que los pongan en contacto con una especialista. Alguien que puede ayudarlos a recobrar la seguridad, de preferencia, en una cita al aire libre.

Por otro lado, mientras el uso de la tecnología ha afectado el desenvolvimiento de los más pequeños, en otros ha llamado la atención por su excelencia en el uso de las mismas. Sam Keusch es un joven de 12 de años que creó un proyecto impresionante para ayudar a personas mayores de edad a solicitar cita para la vacuna.

Hasta el momento, ha ayudado a más de mil personas. Una acción muy noble que siguió del ejemplo de sus padres.