15 formas de empoderar a una niña desde que es pequeña
Cada vez es más importante dotar a nuestros hijos de las herramientas necesarias para que alcancen lo que desean en la vida.
Muchas veces, como padres, no nos damos cuenta de la importancia de empoderar a nuestras hijas desde pequeñas. Cada palabra que le decimos, cada paso que damos, está marcando sus vidas. Sé la persona que quisieras que ellas fuesen.
Una mujer fuerte criará una hija fuerte. Acá te compartimos 15 formas para que tú también puedes empoderar a tu hija desde pequeña, según MamaLatinas:
Madre comparte con su hija frente a la computadora. | Foto: Shutterstock
1. EMPIEZA CON TU EJEMPLO
La mejor forma de enseñar a tus hijas es con el ejemplo. Los niños no son ajenos a lo que hacemos. Ellos escuchan nuestras palabras, observan nuestros pasos y, sin ser conscientes, van copiando nuestro carácter.
La educación empieza en casa, y comienza contigo. Si tú gritas, te reprochas o constantemente te desvalorizas, tus hijas seguirán tu ejemplo. Sé la mujer que quisieras que fueran ellas.
2. EL EJEMPLO DE OTRAS LÍDERES
También puedes planificar para ver con tus hijas la historia de grandes mujeres que han cambiado el rumbo de su destino, y han hecho lo que han querido pese a la sociedad.
Hellen Keller y Marie Curie son grandes ejemplos de empoderamiento femenino que podrían inspirar a tus hijas a seguir sus dueños.
3. PROMUEVE LA HERMANDAD FEMENINA
No es saludable repetirle a tus hijas que son mejores que otras. No se trata de quién es mejor que quién. Es importante que les enseñes a ser solidaria con otras niñas.
Enséñales a no compararse, no juzgar y respetar la forma de ser y las decisiones de otras chicas aunque no coincidan con las de ella.
Madre e hija leen un texto. | Foto: Shutterstock
4. CUÉNTALES SOBRE LA LUCHA DE GÉNERO
Para nadie es un secreto la lucha por la igualdad social que han protagonizado millones de mujeres en todo el mundo, pero tus hijas aún no lo saben.
Enséñales el valor que tuvieron otras mujeres para enfrentarse a la discriminación y cómo lograron que se le concediera el derecho a la igualdad.
5. MUÉSTRALES LAS CONSECUENCIAS SOCIALES
Pese a todos los esfuerzos y los logros de grandes mujeres, todavía existe opresión en algunos países y culturas.
Es importante que les muestres la realidad que viven otras niñas en varias partes del mundo, para que sepan y comprendan que esta lucha es igual para todas.
6. NO LAS CONVIERTAS EN RIVALES
Es necesario que entiendan que no es lo mismo luchar por la igualdad de género que volverse rivales de los hombres.
No se trata de imponerse frente a los hombres o intercambiar los papeles de quién es el “sexo fuerte”. La igualdad no es una superación de las niñas frente a los niños.
Dos niños se saludan con las manos. | Foto: Shutterstock
7. ROMPE LOS PARADIGMAS
Existe la costumbre en muchas familias de diferenciar “las cosas de niños” a “las cosas de niñas”. Esto puede causar un choque o reprimir la inclinación de cualquier chico a jugar con lo que quiera.
De acuerdo con MamasLatinas, lo ideal sería no crear diferencias y evitar esa clase de comentarios que puedan reprimir a tus hijas.
8. NO FRENES SU INICIATIVA
Uno de los consejos más importantes es la invitación a no paralizar su iniciativa. Permite que tus hijas tomen riesgos.
Enfrentarse a lo desconocido es una gran oportunidad para que desarrollen su intuición, su carácter y la confianza en sí mismas.
Una niña y un niño juegan. | Foto: Shutterstock
9. DEJA QUE SE EQUIVOQUE
Lo peor que puedes hacer es criar a tus hijas en una bola de cristal. Déjalas que tomen riesgos, que se equivoquen para que puedan aprender de sus errores.
De lo contrario, podrían vivir con la inseguridad de hacer algo por el miedo a fallar. Los errores son parte de la vida y del crecimiento del ser humano.
10. INVÍTALAS A QUE SE EXPRESEN
Una de las características más resaltantes en muchas familias es la privación de las emociones y opiniones diferentes. Evita que este hábito reine en tu familia.
Si constantemente les haces creer que no deben expresarse, crecerán con la idea de que no tienen derecho a hacerlo. Hazlas sentir que son libres de pensar diferente y expresar su punto de vista.
11. NO LAS SOBREPROTEJAS
¡Cuidado! Muchos padres creen que sobreprotegiendo a sus hijos los están ayudando. La verdad es que no es así.
Piensa que algún día no estarás con ellas. Lo ideal es que aprendan a protegerse solas y que tengan todas las herramientas para aprender de sus errores y seguir creciendo.
Niña "sujetando" el dibujo de una pesa. | Foto: Shutterstock
12. AYÚDALAS A SER INDEPENDIENTES
Enséñales que se tienen a sí mismas en todo momento. Que no importe lo que pase, pueden buscar dentro de ellas la fortaleza para salir adelante.
Esto la ayudará a trabajar en su autonomía, que es su capacidad de tomar decisiones en pro de su bienestar sin la inferencia de terceros.
13. DEJA QUE ELLAS ENCUENTREN LA SOLUCIÓN
Cada vez que surja un problema o se encuentren en unas circunstancias donde no sepan qué hacer, invítalas a reflexionar.
Hazles sentir que ellas también pueden encontrar la solución a cada uno de los retos que se les presenta en la vida.
14. QUE TRABAJEN POR IGUAL
Olvídate de las frases, “esto te toca porque eres niña”. Lo ideal es que cada uno de tus hijos tenga responsabilidades en el hogar sin importar el género.
Si, por lo contrario, les haces sentir que eso les toca por ser mujeres, podrían sentir que las encasillas o que no eres justo respecto a sus obligaciones.
Niños con su madre recogiendo desechos. | Foto: Shutterstock
15. FRENA EL RACISMO EN TU HOGAR
Recuerda que tú eres su más grande ejemplo. Los padres son el pilar fundamental en el crecimiento y desarrollo de sus niños.
Tus hijas te están observando. Si ves que en tu casa hay alguna conducta racista o discriminatoria, frénala a tiempo.
Por otro lado, si eres mamá soltera o estás pasando por una separación, también es importante que conozcas las formas de criar a tus hijos para que sean felices.
Ellos también sufren el divorcio o la separación de sus padres, y es fundamental que comprendan que cuando los padres se separan no lo están haciendo de ellos. Ayúdalos para que no se sientan culpables.