Pilar Eyre recuerda la "noche de confidencias" que tuvo con Rocío Jurado y Pedro Carrasco

La periodista habló sobre el matrimonio de Rocío Jurado y Pedro Carrasco, tras escuchar las declaraciones de la hija de la pareja en Telecinco.

Rocío Carrasco sacudió a la opinión pública con el testimonio que ha entregado en la serie documental 'Rocío, contar la verdad para seguir viva'.

Entre las muchas cosas que ha dicho, también admitió que nunca estuvo de acuerdo con el matrimonio de su madre y Ortega Cano. Ella sigue siendo fiel a su padre Pedro Carrasco.

La periodista Pilar Eyre tuvo la posibilidad de compartir tiempo con el boxeador y la cantante en el hogar que habían construido juntos.

De aquella "noche de confidencias" habló en su blog de Lecturas, donde reveló algunos detalles de la relación entre "La más grande" y Pedro Carrasco.

El boxeador, que gozaba de tanta fama como la cantante, estaba satisfecho con el hogar que tenía al lado de su mujer y su hija. Decía que la vida se había portado muy bien con él.

"Gracias a Dios viven mis padres y tengo una mujer y una hija a las que adoro, no con el corazón, sino con la cabeza, porque soy un hombre muy cerebral", dijo.

Rocío Jurado confesó en aquella reunión que conoció al padre de su hija en una época difícil de su vida. Ella tenía un nódulo en la garganta que la había alejado de los escenarios y recientemente había terminado con su novio.

Ella asistió a un festival taurino y un grupo de fans la aplastó contra una valla. Jurado se golpeó el pecho con una barra de hierro y se desmayó.

Carrasco saltó el ruedo, la tomó en brazos y la llevó a la enfermería. En cuanto despertó, Rocío le propuso ir a su casa a tomar café.

"Nos enamoramos y nos casamos, nadie daba un duro por nosotros y hasta hoy", añadió Jurado.

La cantante afirmaba que había dejado de creer en cosas eternas, pero sí esperaba que su matrimonio con Pedro fuera para siempre.

Pedro no se identificaba con las ideologías machistas ni feministas. Creía que los hombres y las mujeres eran iguales, aunque señalaba que "hay cosas que en un hombre son más perdonables que en una mujer".