Anna y Olivia Gimeno: una barca, una cámara de seguridad, una amenaza entre las claves de la desaparición de las niñas
Lo que parecía una salida convencional de un padre y sus dos pequeñas hijas terminó en una brutal amenaza, la desaparición de las niñas y una madre desesperada que intenta mantener la fe.
Tras su difícil separación, Beatriz Zimmerman y Tomás Antonio Gimeno parecían haber encontrado un saludable equilibrio. Con dos pequeñas en común, ambos se esforzaron por hacer funcionar la separación en pro de las niñas.
El pasado 27 de abril, Gimeno pasó a buscar a Olivia y Anna, de 6 y 1 año respectivamente. El plan era pasar el día juntos y llevarlas de vuelta con su madre a las 9 de la noche, pero eso nunca ocurrió.
UNA AMENAZA
Pasada esa hora, no había rastros del padre ni de las niñas. Beatriz intentó comunicarse con él por teléfono, pero no atendía. Presa de pánico, se acercó hasta el hogar de su ex, ubicado en Igueste de Candelaria, y ahí se impactó por lo que encontró.
En la casa no estaban sus hijas ni el padre de ellas. Además, faltaban muchos objetos personales y ropa. Intentando mantener la calma, la angustiada madre siguió tratando de comunicarse con Tomás Antonio.
Cerca de la 1 de la madrugada, recibió una última llamada del hombre y su mundo se puso de cabeza de inmediato.
“No vas a volver a ver a las niñas. Ni a ellas ni a mí”, fueron las palabras de Tomás, según recoge 20 Minutos.
LOS HALLAZGOS
Tras escuchar la sentencia de su exesposo, Beatriz procedió a denunciar a la Guardia Civil la desaparición de las niñas.
La investigación llevó a las autoridades al puerto de la Marina. Allí, a través de los testimonios de las personas que vieron a Gimeno esa noche y las imágenes de las cámaras, se pudo saber que había partido en su embarcación.
Aunque nadie vio a las niñas, las cámaras captaron al hombre llevando equipaje y cajas hacia la embarcación. Partió alrededor de las 11 de la noche, para luego regresar cerca de la 1 de la madrugada, desesperado por cargar su teléfono celular.
El miércoles siguiente, las autoridades localizaron la barca a la deriva en el Puerto de Güímar y en su interior se encontraron algunos trazos de sangre que aún no se han identificado. La silla de bebé de Anna flotaba alrededor.
La familia de Tomás afirma que también recibieron mensajes de despedida. Además, se determinó que había vaciado las cuentas bancarias.
OPTIMISTA
En el marco del pasado Día de la Madre, Beatriz pidió a todos a través de las redes sociales que visualizaran a sus hijas regresando a sus brazos felices, y que pudieran volver a jugar y a reír.