Corazón de oro: rescata 62 currículums de la basura y logra que contraten a varias personas
Cuando una persona va a buscar empleo, lleva su hoja curricular para así poder demostrar los conocimientos y experiencia que posee.
Una vez que la empresa selecciona al personal, se deshace del material que no le sirve y probablemente lo bota en la basura.
Un grupo de trabajadores jamás imagino que un hombre iba a salvar el futuro laboral de ellos, al realizar una noble causa. Conoce esta inspiradora historia.
Kaká D'Avila es un concejal de Porto Alegre, Brasil, que se encontró con una bolsa llena de folios que llamaron su atención. Cuando la abrió para ver su contenido, se percató de que se trababa de 62 currículums de trabajadores.
El concejal no dudó ni por un segundo en darle utilidad a estos documentos. Quería que estas personas pudieran tener una oportunidad laboral.
Kaká compartió la historia en una publicación de Instagram y la acompañó con el siguiente mensaje:
“¡¡¡Absurdo!!! Esta semana he encontrado 62 currículums en la basura de la calle. Una falta de respeto a los desempleados. Recogí cada uno y lo rehice todo”, escribió.
El hombre manifestó que creó una carpeta con los documentos para distribuirlos en compañías. Afortunadamente, ya han contratado a varias personas.
“Detrás de cada hoja de papel, hay una vida que merece ser valorada”, destacó el concejal en su publicación de Instagram.
La buena acción de este ciudadano brasilero causó conmoción en las redes y los usuarios no dudaron en expresar sus opiniones.
Una persona comentó: “¡Realmente estás haciendo la diferencia! Un ser humano increíble, siempre pensando en los demás. Enhorabuena”. Otro usuario expresó: “Que tristeza ver esto, me alegro de que haya alguien que valore cada currículo”.
Un tercero escribió: “Es increíble, viendo sus acciones tenemos las esperanza en una vida mejor, gracias por todo lo que hace por la gente”.
Sin duda, la buena acción de Kaká D'Avila cambió la vida de muchas personas. Este caballero tiene un corazón de oro y es ejemplo a seguir. ¿Te gustó esta historia?