Así era la casa de la infancia de los príncipes William y Harry junto a la princesa Diana
En su infancia, los príncipes William y Harry llamaron al Palacio de Kensington su hogar. Fue allí donde pasaron sus primeros años junto a sus padres, Diana y Charles.
Poco después de contraer matrimonio, el príncipe Charles y la princesa Diana se mudaron a los departamentos 8 y 9 del palacio de Kensington. Fue allí donde la pareja crio a sus hijos, los príncipes William y Harry.
Hoy en día, el duque de Cambridge vive en la propiedad con su esposa, Kate Middleton, y sus hijos. Habitan el departamento 1A. Hoy te traemos un vistazo al hogar de infancia de William y Harry.
Princesa Diana y príncipe William en su hogar en Kensington en octubre de 1985. | Foto: Getty Images
El palacio de Kensington es una residencia real ubicada en Kensington Gardens, en la zona londinense de Kensington y Chelsea. Ha sido la residencia oficial de distintos miembros de la familia real británica desde el siglo XVII.
Actualmente, es el hogar de los duques de Cambridge, William y Kate, y de los duques de Gloucester, los duques de Kent, el príncipe Michael de Kent y su esposa. Pero a mediados de los 80, fue el hogar que vio a Diana criar a sus hijos.
La joven princesa pasó largas horas con los niños en su departamento en el palacio, jugando y pasando tiempo de calidad juntos. Fue una crianza más bien inusual para miembros de la aristocracia.
Príncipes Charles y William y princesa Diana en Kensington en febrero de 1983. | Foto: Getty Images
El departamento estaba hermosamente decorado, y era un espacio perfecto para criar a una familia feliz. La decoración fue diseñada por la difunta princesa de Gales, con la ayuda del diseñador Dudley Poplak.
Su hogar ocupaba tres pisos del palacio, incluyendo amplias salas de estar, salones de juegos para los niños, una hermosa chimenea, estudios y bibliotecas. Los pequeños príncipes tuvieron mucho espacio para ser libres.
El piso superior contenía las habitaciones de los niños y sus salones de juegos e incontables juguetes. Una lujosa compañía de juguetes infantiles se encargó del diseño del piso, con suaves alfombras con patrones frutales.
Princesa Diana y príncipes William y Harry en octubre de 1985. | Foto: Getty Images
En las fotos de aquellos días, Diana suele estar siempre muy cerca de los niños, jugando con ellos. El hogar contaba con un enorme piano de cola, sobre el cual había muchos retratos familiares.
Los niños posaron sus manos sobre un instrumento por primera vez frente a este piano, bajo la amorosa supervisión de su madre.
En Kensington, la familia era realmente libre, sin las típicas presiones de la monarquía que atosigarían a Diana años después.
Era un espacio donde Diana y sus hijos podían vivir lejos de los paparazzi, las cámaras y los tabloides. Fue el refugio perfecto para forjar valiosos recuerdos que ambos príncipes de seguro siguen atesorando.
Príncipe Harry en Kensington en octubre de 1985. | Foto: Getty Images
Harry y William podían correr, saltar y jugar a sus anchas en el departamento. Había caballitos de juguete, soldados, bloques de construcción, y prácticamente cualquier cosa que pudiesen desear.
Era una plácida existencia, que logró protegerlos de la presión mediática que definiría el resto de sus vidas. Fueron años libres de cámaras, del destello del flash de los fotógrafos, de los rumores y las intrigas.
Fue una infancia idílica en un memorable entorno. Diana se esforzó por darle a sus hijos algo que ningún miembro de la familia real había tenido antes: una verdadera infancia.
Príncipes Harry, William y Charles y princesa Diana en Kensington en diciembre de 1986. | Foto: Getty Images
Charles también estuvo presente en esa época. Su relación con Diana aún no se había desmoronado. La abismal distancia que los separó años después no existía.
Fueron muchas las noches que pasaron reunidos en familia, ante el calor de una hermosa chimenea blanca.
También compartieron ratos amenos en el comedor, un amplio espacio con cortinas rojas y una gran mesa verde oscuro.