Robert Redford vivió la dolorosa experiencia de perder un hijo años antes de la muerte de James
La vida del actor no solo ha estado llena de éxitos y fama, en su pasado algunas tragedias personales albergaron sufrimiento en su corazón.
Robert Redford vivió la dolorosa experiencia de perder a un hijo años antes de la muerte de James. La partida de su retoño fue completamente inesperada y devastó al histrión.
El niño tenía solo 10 semanas de nacido. Su partida alteró para siempre el equilibrio mental de la celebridad quien consiguió en la actuación un escape a su depresión.
Robert Redford. | Foto: Getty Images.
DESGARRE EMOCIONAL
El fallecimiento de Scott, quien solo era un recién nacido provocó un desgarre emocional en la estrella de cine. El hecho ocurrió en noviembre de 1959 y todavía encierra un profundo dolor en su vida.
Aquella noche Robert le dio un beso a su bebito recién nacido, lo acostó en su cuna y se retiró de la habitación para disfrutar de la compañía de Lola. Ella era la novia con la que se había casado en Las Vegas.
Estaban en su apartamento en Manhattan. Una propiedad a la que acababa de mudarse. Días antes había estrenado en Broadway en el nuevo drama ‘The Highest Tree’.
Cuando amaneció y fue a ver a su hijo estaba muerto. Scott fue víctima de la muerte súbita, un síndrome que en ese entonces ni siquiera tenía nombre.
Redford era joven y sin saber nada sobre dicho síndrome se llegó a culpar, pensando que había hecho algo mal. Desde la partida del lactante el actor ha lidiado con una herida que nunca ha sanado por completo.
LA SALUD DE JAMES
James Redford, su hijo mayor, tuvo una vida con muchas complicaciones médicas. A pesar de los baches en su salud triunfó. Se convirtió en director de cine y documentalista.
Poco después de nacer Jamie sufrió una enfermedad grave en la membrana hialina, un problema respiratorio que casi lo mata. A pesar de lo delicado que estaba y de los pronósticos médicos, el hijo del actor se salvó.
Pero sus problemas de salud siguieron afectándolo a lo largo de su existencia. Comenzó a padecer del hígado por lo que ameritó un trasplante a los 30 años que terminó siendo un fracaso.
Luego vino una segunda cirugía para darle un nuevo órgano. Pasó días terribles y soportó una dolorosa colitis ulcerosa y también la extirpación de su colon.
Su padre siempre estuvo a su lado y lo acompañó cada vez que necesitó entrar al quirófano. Jamie murió el 16 de octubre de 2020 a los 58 años. Otra tragedia que destrozó al histrión y dejó un inmenso dolor que no ha sabido cómo superar.
La vida privada de Redford estuvo marcada por la tragedia familiar. Más allá de la muerte de sus hijos, la depresión provocó un efecto grave en una de sus hijas, quien quedó incapacitada por años. No ha sido fácil para la estrella y sus seres queridos. El destino les ha puesto duras pruebas y en algunas han fracasado.