Dick York, de "Hechizada", limpió apartamentos y dependió de la beneficencia antes de morir por enfermedad incurable hace 3 décadas
Dick York hizo una fortuna con 'Hechizada', pero antes de morir de una enfermedad incurable que le impidió salir de su casa durante meses, tuvo que limpiar apartamentos.
Nacido en septiembre de 1928, Dick York creció en el seno de una familia trabajadora. Su madre, Betty, era costurera, mientras que su padre, Bernard, trabajaba como vendedor.
Dick York filmando "The Alfred Hitchcock Presents" el 3 de septiembre de 1959. | Foto: Getty Images
LA CARRERA TEMPRANA DE DICK YORK
Después de mudarse de Indiana a Chicago, una monja de la escuela primaria St. Mary of the Lake notó que su voz era excepcional, por lo que cuando solo tenía nueve años, se unió a la banda Jack and Jill Players.
Debutó en la obra 'Water Babies' y estudió teatro en De Paul Academy y De Paul University. Para ese momento, sin embargo, ya había conseguido papeles menores en la radio.
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En 1944, York ganó notoriedad nacional al trabajar en la serie de televisión 'That Brewster Boy'. Su carrera mejoró después de unirse al elenco de 'The Jack Armstrong Show' y convertirse en el maestro de ceremonias de 'Junior Junction'.
Aunque su carrera se disparó en 1964 después de ser elegido para interpretar a Darrin Stephens en 'Hechizada' junto a Elizabeth Montgomery y Agnes Moorehead, el proyecto que realmente cambió su vida fue 'They Came to Cordura', un western lanzado en 1960.
Debido a un accidente durante el rodaje de una de las escenas, terminó con más de 81 kilos sobre él, lo que le desgarró los músculos del lado derecho de la espalda.
La lesión incapacitante fue permanente, pero no estaba listo para dejar de trabajar. Para aliviar el dolor, tomaba analgésicos, y finalmente se volvió adicto a ellos.
Retrato de Dick York. | Foto: Getty Images
LA ADICCIÓN Y LA CAÍDA DE YORK
Su adicción a las pastillas fue un problema desde el primer día de rodaje de 'Hechizada', ya que el director William Asher lo encontró desmayado en su auto cuando se suponía que iban a filmar. El director consideró despedirlo de inmediato, pero le dio otra oportunidad.
Asher señaló que no estaba seguro de si los problemas de sustancias de York comenzaron debido a su lesión en la espalda o si en realidad ya estaba lidiando con la adicción a las drogas y su dolor de espalda había sido una excusa.
Las cosas se complicaron más durante la temporada 5 de la conocida serie, cuando York tuvo un ataque en el set y Montgomery no pudo soportarlo más. Ella solicitó encontrar un reemplazo para York, y Dick Sargent intervino.
Después de eso, York luchó por regresar a la industria del entretenimiento y finalmente decidió alejarse de ella. Y por si eso no fuera lo suficientemente malo, le diagnosticaron enfisema, una afección pulmonar que causa dificultad para respirar.
LOS ÚLTIMOS AÑOS DE YORK
Después de que terminó su carrera en Hollywood, gastó sus ahorros en la compra de un edificio de apartamentos en West Covina y había planeado vivir de los ingresos por alquiler.
Dick York y Elizabeth Montgomery filmando la cuarta temporada de "Hechizada" en julio de 1967 | Foto: Getty Images
Desafortunadamente, cuando sus inquilinos no pagaron la renta, no pudo desalojarlos recordando su propia juventud. Finalmente, se quedó sin dinero y no pudo pagar la hipoteca, por lo que el banco embargó toda la propiedad.
La única forma en que el actor podía conservar su apartamento era limpiando otras unidades. Pasó de ganar seis cifras a obtener su primer cheque de asistencia social en 1976.
En 1989, ya había superado su adicción a los analgésicos, pero se estaba muriendo de enfisema y vivía con su esposa, Joan, con una pensión del Screen Actors Guild de 650 dólares al mes.
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En ese momento, Dick confesó que no había salido de su casa durante meses y estaba atado a una línea de vida de oxígeno de 25 pies. El 20 de febrero de 1992, falleció tristemente a los 63 años.
El difunto actor dedicó sus últimos días a ayudar a otras personas sin hogar en Chicago, colaborando en la recolección de 300 sacos de dormir, 5.000 latas de jugo de toronja y 12.000 chaquetas sobrantes. Descansa en paz, leyenda.