Hombre de 38 años muere tres semanas después de casarse con el "amor de su vida" en un hospicio
Un hombre estaba en su lecho de muerte en un hospicio cuando pronunció sus votos al amor de su vida. Lamentablemente falleció unas semanas después, pero no sin dejar un legado.
Simon Stevens, de 38 años, era un hombre sano y activo que disfrutaba de su vida junto a su pareja, Lynne Male, y sus tres galgos. Sin embargo, sus vidas dieron un vuelco en marzo de este año.
Al hombre oriundo de Inglaterra le diagnosticaron mesotelioma peritoneal, una condición rara y mortal resultante de la exposición al asbesto. Era un empleado muy querido de Jaguar Land Rover y este mes falleció. Más detalles abajo.
Simon Stevens y Lynne Male junto a su familia mientras se casan en el hospital. | Foto: Facebook/lynne.male
CEREMONIA AGRIDULCE
Antes de fallecer, se casó con Lynne, con quien había estado viviendo en pareja durante 14 años. Se dijeron sus votos e intercambiaron anillos en el Hospicio Marie Curie de Solihull el pasado martes 26 de octubre con familiares cercanos alrededor de su cama del hospital.
La mujer compartió: “La boda estaba inicialmente planeada para el 28 de octubre, pero Simon se puso más enfermo repentinamente ese martes por la tarde, y la boda terminó en unas cuatro horas. Fue especial tener a nuestra familia inmediata allí”.
EL ANUNCIO DE SU MUERTE
Se creó un GoFundMe para ayudar a Stevens con sus facturas médicas. En la página, un triste anuncio reveló que había muerto. Falleció el pasado 13 de noviembre. En el comunicado lo describían como “valiente y fuerte” y también que sería echado de menos.
“Simon se durmió plácidamente ayer por la noche con Lynne y su madre Julie a su lado. Solo tenía 38 años. Lo extrañaremos profundamente, pero su legado perdurará”, decía la publicación compartida.
IMPACTANTE NOTICIA
La noticia de la enfermedad de Stevens fue impactante. Tuvo un inicio rápido y convirtió a un hombre sano en una sombra de sí mismo casi de la noche a la mañana.
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El deseo del hombre era recaudar fondos para un centro de rescate de perros en Coventry Road, en Solihull, Inglaterra. La pareja regularmente ofrecía su tiempo y ayudaba en el Daybreaks Trust, dedicado a esto.
EMPEZARON UNA CAMPAÑA
La instalación está dedicada a ayudar a las perreras y garantizar la seguridad de los perros en el área. Ruth Price, fundadora de Daybreaks, inició una campaña en honor a Stevens.
“Simon solicitó que organizáramos una recaudación de fondos en su nombre. El objetivo es recaudar dinero para ayudar a garantizar el futuro y asegurar las perreras en los próximos años”, compartió Price.
SU VERDADERO LEGADO
Ruth expresó que la reubicación de los galgos había sido un punto importante para Stevens. Dijo que el dinero de la recaudación de fondos cambiaría la vida de los perros adoptados.
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Añadió que la perrera era un lugar especial para Simon. Agregaba valor y propósito a su vida. La mujer afirmó que ayudar y cuidar a los perros sería un “verdadero legado” para el hombre que amaba a la organización y a los perros.
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