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Una mujer mayor caminando sola | Foto: Shutterstock
Una mujer mayor caminando sola | Foto: Shutterstock

Anciana que ha estado ahorrando por 40 años descubre que su cuenta bancaria está vacía - Historia del día

Mayra Pérez
15 may 2022
17:00

Dolores era una mujer extremadamente frugal y tenía unos buenos ahorros cuando cumplió 80 años. Pero un día, fue al banco para hacer un depósito y descubrió que no tenía dinero. El gerente le dijo algo impactante.

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La señora Dolores Salgado fue al banco a depositar un cheque en su cuenta bancaria. Durante los últimos 40 años, había estado ahorrando todo lo que podía.

Había tenido un trabajo relativamente bien pagado, y vivía muy frugalmente, por lo que lograba aumentar sus ahorros mes a mes.

Imagen con fines ilustrativos. | Foto: Pexels

Imagen con fines ilustrativos. | Foto: Pexels

Su hijo, Andrés, se enojaba de niño porque no siempre podía tener todo lo que le pedía a su madre, pero ella siempre cubrió todas sus necesidades, sin lujos.

Cuando se jubiló a los 65 años, el aporte que hacía al banco se redujo en forma considerable, pero ella tenía una meta en su mente y se esforzaba en alcanzarla. Los funerales son muy costosos y el futuro incierto; quería estar preparada.

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A los 80 años, estaba a punto de llegar a su soñada meta. Era una cantidad significativa de dinero, y pensaba heredarle a su hijo una buena parte. Tenía suficiente para pagar su funeral cuando llegara el momento, y cubrir cualquier eventualidad en años que le quedaban.

Quería darle a su hijo un buen monto para que pudiera independizarse y así pudiera tener un mejor futuro. Esperaba que al recibir su herencia entendería el por qué había llevado una vida tan frugal.

En el banco, mostró su identificación a la cajera antes de preguntar su saldo. Quería estar segura de cuánto tenía en su cuenta antes de hacer el depósito. Pero lo que le dijo la alteró muchísimo.

“Señora Salgado, parece que no hay nada en su cuenta. Aquí dice cero dólares”, reveló la amable señora que la atendía.

“¿Qué? Eso es imposible. ¿Estás segura de que estás buscando en la cuenta correcta? ¿Puedes revisar de nuevo?”, preguntó Dolores, con las manos temblando un poco por el nerviosismo.

“Lo siento. Estoy mirando la cuenta correcta. No hay nada aquí. Recientemente, sacaron todo el dinero”, dijo la señora.

Imagen con fines ilustrativos. | Foto: Pexels

Imagen con fines ilustrativos. | Foto: Pexels

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Dolores comenzó a hiperventilar y a sacudir la cabeza rápidamente de un lado a otro. Eso no podía estar pasando. Todo el fruto de su esfuerzo había desaparecido.

No tenía idea de lo que le estaba diciendo. ¿Cómo había desaparecido el dinero? Siempre había sido muy cuidadosa. No tenía sentido, y no podía creer lo que le estaba pasando.

“Señora, por favor cálmese. Llamaré al gerente y llegaremos al fondo de esto”, le aseguró la empleada. Ella asintió en señal de agradecimiento y se sentó a esperar a que el gerente la llamara a su oficina.

Durante su espera, las dudas comenzaron a atormentarla: ¿Debería haber gastado el dinero en lugar de ahorrarlo? ¿Después de una vida de sacrificios, lo perdí todo? ¿Debería haber elegido otro banco?

Unos minutos después, el gerente la llamó. Tenía algo importante que decirle: “Señora Salgado, parece que hubo un error con su cuenta. Pero no se preocupe, lo arreglaremos pronto”, le dijo, mientras escribía en su computadora.

De pie, junto a su gerente, la cajera del banco intentaba tranquilizarla: “Lo más probable es que sea un error del sistema, señora Salgado. Pero su dinero está ahí, se lo aseguro”.

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Imagen con fines ilustrativos. | Foto: Pexels

Imagen con fines ilustrativos. | Foto: Pexels

El gerente del banco continuó escribiendo y de repente exclamó. “¡Ajá! Lo encontré. Su dinero ha sido transferido accidentalmente a la cuenta de otra persona. Puedo arreglarlo”.

Dolores sonrió aliviada. Ahora que habían encontrado el error, solo debía esperar a que arreglaran todo. Los empleados del banco le aseguraron que todo estaría bien y que su dinero le sería regresado en breve.

Ella no quería volver a pasar por algo así. A su edad, es posible que no pueda manejar otro susto como ese, por lo que tomó una decisión. Disfrutaría de sus ahorros y no esperaría la muerte para compartirlos con su hijo.

Le dijeron que esperara unos días para tener de regreso su dinero. Llamó a Andrés para que la recogiera, porque no estaba segura de poder caminar a casa. Le contó todo, y él le dijo que era increíble que hubiese guardado tanto dinero.

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Apenas le solucionaron el problema, retiró todo su dinero y cerró su cuenta de inmediato. Le dio casi todo a su hijo, quien se sintió increíblemente agradecido por ello, y ella pudo darse muchos gustos en sus últimos años.

Imagen con fines ilustrativos. | Foto: Pexels

Imagen con fines ilustrativos. | Foto: Pexels

¿Qué podemos aprender de esta historia?

  • Ante situaciones inciertas, lo ideal es no entrar en pánico. Las instituciones financieras tienen mecanismos para proteger el dinero y recuperarlo si algo sucede.
  • Ahorrar para el futuro es admirable, siempre que no implique una vida de limitaciones. Dolores tenía una meta en mente y quería ahorrar tanto como pudiera. Sin embargo, al pensar que todo estaba perdido, llegó a temer que todo su sacrificio hubiese sido en vano.
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Este relato está inspirado en la historia de un lector y ha sido escrito por un redactor profesional. Cualquier parecido con nombres o ubicaciones reales es pura coincidencia. Todas las imágenes mostradas son exclusivamente de carácter ilustrativo. Comparte tu historia con nosotros, podría cambiar la vida de alguien. Si deseas compartir tu historia, envíala a info@amomama.com.

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