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Hombre entrando a una cueva | Foto: Shutterstock
Hombre entrando a una cueva | Foto: Shutterstock

Mujer sigue a su marido que salió del hotel por la noche en sus vacaciones: lo ve entrar a una cueva - Historia del día

Mayra Pérez
14 feb 2023
04:20

El esposo de Tina, Adam, sugirió unas vacaciones en un lugar específico de Dakota del Sur. No tenía idea de por qué hasta que él se escapó una noche. Lo siguió hasta que entraron en una cueva aterradora y lo que vio dentro fue completamente inesperado.

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"Honestamente, no entiendo por qué elegiste Dakota del Sur. Podríamos ir a Nueva York. Ver un espectáculo de Broadway, o incluso Disney World sería mejor. ¿Qué hay allí?", se quejó Tina cuando su esposo, Adam, insistió en que irían a ese lugar.

"Dakota del Sur es increíble, cariño. Mis padres me llevaban allí todo el tiempo cuando era niño. Hay hoteles cerca de un bosque, visitas guiadas a cuevas y muchas otras cosas", dijo Adam con una sonrisa, mientras seguía concentrado en la carretera.

Imagen con fines ilustrativos | Foto: Pexels

Imagen con fines ilustrativos | Foto: Pexels

"¿Qué tienen de bueno las cuevas? No nos vamos a quedar dentro de una, ¿verdad?", preguntó, casi al borde del pánico.

"No, no. Sé que no te gustaría eso. Pero vamos a ver el Monte Rushmore y otras cosas maravillosas. Será increíble. Ya verás", continuó, más alegre de lo que ella lo había visto nunca. Ella suspiró y decidió disfrutar lo más posible de estas vacaciones.

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Su recorrido por el Monte Rushmore no estuvo mal. Se divirtió más de lo esperado y compró un par de excelentes recuerdos para sus padres en una tienda de regalos.

"¿Ves? Sabía que te gustaría", dijo Adam cuando llegaron al hotel.

"Tienes razón. Fue increíble. Además, la vista de este hotel es espectacular. ¿Te quedabas aquí con tus padres cuando eras pequeño?", preguntó Tina, mirando por la ventana.

"No. Este hotel es más nuevo. Creo que solía ser un lugar para autocaravanas, pero mis padres y yo no nos quedamos allí. Simplemente pasamos y exploramos esos bosques. Era divertido. Me encantan las cuevas", dijo. Parecía distraído.

"Está bien, cariño. Me daré un baño", dijo Tina y se fue.

Unas horas más tarde, estaba metida en la cama y en pocos minutos estaba profundamente dormida. De pronto, un sonido inesperado la despertó. Abrió un ojo y vio a su esposo al pie de la cama, totalmente vestido.

Imagen con fines ilustrativos | Foto: Pexels

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Parecía estar actuando sigilosamente, y Tina sintió un escalofrío en la espalda. Pero fingió seguir dormida cuando él se volvió hacia ella. Oyó que la puerta de la habitación se cerraba y salió de la cama.

"¿A dónde va? ¿Qué está pasando?", se preguntó mientras imaginaba miles de escenarios. Ella tenía que seguirlo. Entonces miró a su alrededor y agarró una camiseta, un suéter y pantalones para evitar congelarse afuera.

Vio con claridad que salía por la puerta principal del hotel y caminaba hacia el bosque. "¿Está loco?", se preguntó.

Tina caminó muchos pasos detrás de él, tratando de no alertarlo de su presencia. Se notaba que él se dirigía a un lugar muy concreto, y Tina necesitaba saber dónde.

Después de caminar durante casi 20 minutos, vio a Adam acercarse a una cueva. Se detuvo y se preparó para lo que debía hacer a continuación. Este era el momento más aterrador de su vida. ¿Quién entra a una cueva de noche? ¿Qué estaba haciendo su esposo?

Entró lentamente, tratando de ser discreta, y caminó hasta que escuchó voces resonando en las paredes.

"¡No puedo creer que estés aquí!", dijo una voz femenina.

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"Yo tampoco puedo creerlo. Me arriesgué para venir", respondió Adam. "Emily, yo… han pasado 15 años, pero parece que fue ayer".

Imagen con fines ilustrativos | Foto: Pexels

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"Oh, Adam," respiró la voz, y su conversación terminó. El corazón de Tina se rompió cuando los inconfundibles sonidos de besos y la pasión resonaron en el área. Aun así, tenía que verlo con sus propios ojos.

Había un punto de luz. Uno de ellos había dejado caer su teléfono, iluminando el área. Pero la escena frente a ella era muy clara. Se estaban besando, y las cosas se estaban poniendo aún más intensas.

Tina no pudo mirar más. Prácticamente, corrió de regreso al hotel. Al llegar a su habitación, agarró su bolso y todo lo que pudo encontrar, incluidas las llaves del auto.

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Salió corriendo de allí, sin importarle nada, y se subió al auto. Era el coche de Adam, pero a ella no le importaba. "¡Me estaba engañando con una mujer en una cueva en Dakota del Sur! ¡Al diablo con él!", se dijo.

Rápidamente, se dio cuenta de que no conocía bien el área, así que se detuvo en otro hotel y consiguió una habitación. El día había sido agotador, y el cansancio le permitió dormirse y dejar de sentir tanto dolor.

Al día siguiente, fue a desayunar a un restaurante local. Se sentó en el mostrador.

"¿Qué le sirvo?", preguntó una camarera. "Tenemos café, jugo de naranja, gaseosa", ofreció.

"¿Tiene algo más fuerte?", quiso saber Tina.

"No a esta hora", dijo la mujer, señalando el reloj del lugar.

Imagen con fines ilustrativos | Foto: Pexels

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"Está bien, un poco de café entonces. Muy fuerte, por favor", pidió Tina y se frotó la frente.

"¿Mala noche?", dijo una voz masculina junto a ella, y Tina se giró hacia una cara redonda y amistosa que le sonreía levemente.

Por lo general, ella no hablaba con extraños, incluso si parecían amistosos. Pero tenía razón. La noche anterior había sido la peor de su vida.

"Se podría decir eso", respondió ella, inexpresiva.

"Apuesto a que no fue peor que la mía", comentó él.

Sus cejas se levantaron. "Oh, ¿en serio? ¿Cuánto apostarás?".

"¡Caramba!, ¿tanta confianza tienes? Déjame pensar", el hombre hizo una pausa por un segundo. "Quien tenga la peor historia, compra el desayuno".

"Trato hecho", dijo Tina mientras la camarera le traía el café y sorbía el líquido amargo y muy caliente.

"Comenzaré entonces", dijo el hombre. "Soy Jerry, por cierto. Anoche fue mi quinto aniversario con mi novia. La pasamos de lo mejor. Fue todo lo que podía ser. Pero ella me despertó a las 4 a. m. de hoy y me dijo que se iba con el 'chico en la cueva'".

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Imagen con fines ilustrativos | Foto: Pexels

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Tina casi escupió su café. "¿Qué?".

"Eso es lo que dije. Pero ella dijo que había esperado al chico en la cueva durante 15 años y comenzó a empacar", continuó Jerry, sus ojos reflejando sus sentimientos sobre ese recuerdo.

"Ella dijo que era ahora o nunca, y que no podía volver a perderlo. Se iban a ir juntos. Pensé que estaba teniendo un colapso mental".

"Oh, Dios mío", susurró Tina. "¿Qué pasó después?".

"La seguí, y había un hombre esperándola en el lobby del hotel. Él lucía… bueno, su elegante camisa estaba toda arrugada, así que supe que algo había pasado. Me quedé allí, mirando mientras se alejaban", dijo Jerry conmocionado, como si estuviera reviviendo la escena.

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"Guau", murmuró Tina.

Jerry negó con la cabeza, disipando su memoria, y le sonrió a Tina. "Entonces, ¿tu historia es peor? ¿O gané la apuesta?".

"No sé si es peor o mejor… ¡Es prácticamente la misma!", dijo Tina, y Jerry frunció el ceño. Unos minutos después, ambos se estaban riendo del absurdo.

Cada uno pagó su desayuno y se separaron, pero no antes de intercambiar números de teléfono. Tina se fue a casa y solicitó el divorcio. No supo mucho más sobre los apasionados amantes de las cuevas y, sinceramente, ya no le importaba.

Imagen con fines ilustrativos | Foto: Pexels

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A través de mensajes de texto, profundizó su amistad con Jerry, quien vivía a cinco horas de distancia. Poco tiempo después, Tina solicitó un trabajo en su ciudad y se mudó cerca.

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Unos meses más tarde, comenzaron a salir y prometieron que nunca, nunca, nunca irían de vacaciones cerca de las cuevas.

¿Qué podemos aprender de esta historia?

  • Las cosas que te hacen sufrir hoy, podrás superarlas con el tiempo: El desamor y el dolor de los malos recuerdos se desvanecen con el tiempo.
  • A veces, las tragedias unen a las personas: Jerry y Tina se conocieron después de haber sufrido la peor traición de sus vidas. Eso, de alguna manera, los unió.

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Este relato está inspirado en la vida cotidiana de nuestros lectores y ha sido escrito por un redactor profesional. Cualquier parecido con nombres o ubicaciones reales es pura coincidencia. Todas las imágenes mostradas son exclusivamente de carácter ilustrativo. Comparte tu historia con nosotros, podría cambiar la vida de alguien. Si deseas compartir tu historia, envíala a info@amomama.com.

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