Fallece Nayara, la niña cuya sonrisa se convirtió en la imagen de la lucha contra el cáncer
La pequeña niña cuya ardua lucha logró inspirar al mundo entero finalmente está en un lugar mejor, y miles de personas lamentan la triste pérdida.
Según reporta Viralistas, Nayara Domínguez, la valiente jovencita que fue diagnosticada de cáncer a los 9 años, emprendió una larga y difícil batalla contra la terrible enfermedad, intentando superarla por medio de un extenso tratamiento que incluyó sesiones de quimioterapia que tuvieron excelentes resultados.
Durante todo ese tiempo, Nayara jamás dejó de sonreír. Su increíble entereza de carácter y optimismo ante la vida terminaron convirtiéndola en la imagen de la Fundación Juegaterapia, dedicada a ayudar a los niños con cáncer a través de juegos terapéuticos con una serie de beneficios para su salud y recuperación..
Junto al cantante David Bisbal, Nayara presentó un nuevo Baby Pelón, proyecto que recauda fondos para niños con cáncer a medida que crea conciencia en la población general.
Tristemente, Nayara ya ha dejado este mundo. La joven oriunda de Alcalá de Henares, España, perdió toda su cabellera, pero jamás perdió la sonrisa que la caracterizaba, y nunca dejó de afrontar su dura condición con arrojo y valentía.
Nayara era prima de Laura Domínguez, jugadora del Rayo Vallecano en la misma localidad, quien constantemente apoyó a la pequeña durante su larga lucha.
"Le gustaba presumir mucho, bailar y daba mucho amor, siempre decía que de mayor quería ser famosa, como su prima Laura", dijo un pariente de Nayara.
Adoraba al cantante Abraham Mateo, y en sus últimos días de vida, pudo hablar con él, le cantó por teléfono e incluso recibió una visita el "El Hombre de Negro" en su habitación en el hospital, donde le regaló la nueva camiseta de David Bisbal.
Nayara planeaba un viaje a Disneyland Paris. Afortunadamente, recibió una visita de Mickey y Minnie estando en el hospital.
Su trágica muerte ha roto los corazones de personas de todo el mundo. Su prima Laura le dedicó el partido que jugó el día antes de su muerte, aunque las jugadoras denunciaron que el árbitro no les permitió rendirle tributo con un minuto de silencio.
Nayara llegó a ver un juego y compartir con el equipo, recibiendo una camiseta firmada que atesoró desde entonces. Sus parientes conservan muchos recuerdos de la adorable luchadora. "Tendremos que aprender a vivir sin ella", dijo la familia.