Hombre recupera movilidad en torso tras ser primer humano paralizado tratado con células madre
Un jovencito logró recuperar el movimiento en toda la parte superior de su cuerpo y extremidades tras un innovador tratamiento con células madre.
Según reporta Historias Guru, hace años que científicos y políticos debaten las legislaciones, implicaciones éticas y morales y los potenciales beneficios de los tratamientos de células madre. Grandes promesas fueron hechas al público sobre su potencial, y eventualmente, se silenció a los detractores a favor del progreso.
Ahora, tras décadas de debates teóricos, la ciencia médica finalmente puede mostrarnos los resultados de estas nuevas terapias y lo que pueden hacer por la humanidad. Un joven discapacitado y parapléjico fue tratado con células madre, y los resultados han sido todo un éxito. Es el primer caso en la historia.
Kristopher Boesen recibió la increíble oferta de un procedimiento que potencialmente cambiaría su vida para siempre usando células madre, las cuales:
"Tenían la capacidad de arreglar el tejido inquieto dañado por medio de la substitución de las células dañadas"
El procedimiento no acarreaba ningún riesgo para Kris, pero tampoco ofrecía garantías de funcionar. Comenzó en abril de 2016, con la inyección de 10.000.000 de células madre AST-OPC1 por el Dr. Liu, directamente en la médula de la espina dorsal de Kris.
Estas células son derivadas de donaciones de óvulos fertilizados in vitro. El Dr. Liu explicó que:
"Por lo general, los pacientes con lesión de la médula espinal se someten a una cirugía que estabiliza la columna, más se hace poquísimo para restaurar la función motora o bien sensorial"
Agregó que "con este estudio, probamos un procedimiento que puede prosperar la función neurológica, lo que podría representar la diferencia entre estar de forma permanente paralizado y ser capaz de emplear los brazos y las manos".
Dijo además que "la restauración de la función a ese nivel podría prosperar significativamente la vida diaria de los pacientes con lesiones graves de médula".
Por increíble que parezca, en apenas tres semanas de tratamiento Kris comenzó a dar señales de mejoría. Luego de dos meses ya era capaz de contestar el teléfono, escribir su nombre y manejar una silla de ruedas por su cuenta. Su función motora mejoró radicalmente.
Kris recuperó la función en dos niveles de su médula espinal, lo cual implica un enorme cambio en su calidad de vida. Para Kris, es la diferencia entre poder moverse por su cuenta y no poder moverse en lo más mínimo. Kris ha logrado recuperar su independencia, y eso es hermoso.