El abogado de la familia de Rebecca Zeni, alegó que la modelo "era literalmente comida viva de adentro hacia afuera"
Ella fue una modelo bella, famosa y rebelde durante los años 40 y 50. Nadie esperaba que terminaría sus días de forma tan desgarradora en un centro de retiro.
La exmodelo Rebecca Zenni terminó viviendo en el asilo de ancianos Shepherd Hills, en LaFayette, Georgia, donde los ácaros y garrapatas que esparcían sus huevos por todo su cuerpo la fueron devorando lentamente.
El Diario NY revivió la historia de esta sufrida mujer que murió en 2015 a sus 93 años, con una mano a punto de caérsele y bacterias letales corriéndole por la sangre.
Según el sitio web, los últimos seis meses de su vida fueron de intenso dolor, luego de permanecer cinco años en el asilo donde prefirieron dejarla morir en vez de atenderla.
Rebecca era una anciana dependiente de otras personas, que fue diagnosticada con demencia y otras enfermedades cuando ingresó al lugar en 2010, a los 87 años de edad.
En 2013, un brote de sarna en el lugar afectó no solo a Rebecca, sino también a otros pacientes y empleados.
Ahora el asilo Shepherd Hills fue demandado y acusado de no haber contenido esa epidemia y de todo un historial de violaciones de salud.
“Ella estaba siendo literalmente comida viva de adentro hacia afuera”, alegó Mike Prieto, abogado de la familia.
Aunque un médico indicó el medicamento para la mujer, este no era administrado al pie de la letra y la exmodelo murió por septicemia a consecuencia del Staphylococcus aureus que, de acuerdo con The Washington Post, contrajo con la sarna.