Adolescente termina en sala de emergencias a causa de pequeña oruga venenosa
Logan Pergola no tenía idea de qué la pasó, solo sabía que su muñeca estaba "en llamas" y el dolor le subía por el brazo.
El joven de 15 años fue voluntario con su familia haciendo jardinería en Zephyrhills. Mientras limpiaban árboles y matorrales, algo lo picó, dejando una gran marca en su muñeca. WFLA reseñó lo ocurrido.
Le dijo a su madre, Andrea, que le estaba ardiendo mucho. Poco después, una violenta erupción comenzó a subir por su brazo y luego, se extendió a su pecho.
Su madre lo llevó a un lavabo y lavó el punto de contacto original en su muñeca. Ella incluso probó un remedio herbal y puso ajo en la herida.
"Esperaba que el ajo eliminara las toxinas", dijo la madre de tres. Pero, Logan no estaba mejorando. Él palideció y el dolor empeoró.
"Mi padre vio la oruga, se puso guantes y la recogió. La pusimos en una bolsita y comenzamos a investigar sobre ella rápidamente", dijo Andrea.
En cuestión de minutos, la madre descubrió de qué se trataba. El insecto con el que su hijo había entrado en contacto parecía ser lo que comúnmente se conoce como oruga del puss u oruga del áspid, que a menudo se encuentra cerca de los robles.
"Descubrimos que esta oruga particular tiene pelo venenoso y también tiene glándulas venenosas. Y, dado que parecía ser un adulto, sabíamos que el veneno sería aún más fuerte. Sabíamos que teníamos que llevarlo a la sala de emergencias", dijo Andrea.
Mira el video donde la madra narra lo ocurrido.
La familia se apresuró a llevar a Logan al Hospital de Florida en Zephyrhills, donde los médicos sabían de inmediato con qué estaban tratando, especialmente cuando vieron a la oruga encerrada dentro de una bolsita.
Comenzaron a administrar medicamentos por vía intravenosa, incluida una dosis alta de Benadryl, prednisona y medicamentos contra las náuseas.
"Logan perdió el conociemiento varias veces. Después de unas tres horas, finalmente abrió los ojos y comenzó a hablar con nosotros. Habíamos orado por él. Solo queríamos que mejorara rápidamente", manifestó Andrea.
Por su parte, Logan le dijo a la periodista Melanie Michael que "le diría a cualquiera que use guantes. No estaba usando ninguno".
Andrea advirtió a amigos y familiares sobre lo que le pasó a su hijo. Ella no tenía idea de que la historia crecería tan rápido y viajaría tan lejos. Su objetivo principal era advertir a otros padres y familias por ahí.
"Somos floridanos nativos. Estamos afuera todo el tiempo, acampando, afuera, en el bosque. No teníamos idea de que estaba ahí afuera. Odiaría que un niño pequeño lo recoja. Logan está saludable y pesa 100 libras, pero esto lastimaría a un niño pequeño incluso peor que a mi hijo de 15 años".
Aunque se ven divertidas, ese tipo de orugas del sur no solo lucen sus rebeldes crines. Los pelos individuales sirven como un mecanismo de defensa al romper y causan ardor y picazón.
También ocultan espinas conectadas a las glándulas del veneno, y la toxina que liberan es lo que casi derriba a Logan.