Dos estudiantes rompieron la ventana para salvar a un bebé de 17 meses atrapado dentro de un auto

Jack Long y Shane Simpson salvaron a un niño que quedó encerrado dentro de un coche estacionado bajo un sol sofocante.

Ambos acababan de terminar su práctica de fútbol cuando vieron a una anciana tratando de abrir un automóvil con un martillo, según informó Griffon Sports Insider.

Esa mujer era Teresa Gall, quien inadvertidamente encerró a su nieto de 17 meses, Liam Snook, dentro del automóvil. Liam estaba en riesgo de sofocación, con la temperatura alcanzando los 98 grados.

Liam estaba vomitando y desmayándose debido al calor extremo, aunque solo había estado allí por un par de minutos. "Dios, por favor envía a alguien", se recordó Teresa orando, mientras golpeaba el automóvil estacionado.

Teresa dijo que ella colocó a Liam en su asiento y se fue a abrazar a su hermana para despedirse. Se horrorizó cuando se dio cuenta de que todas las puertas del automóvil estaban cerradas con llave y con la llave en el interior del automóvil.

Después de un par de minutos, el bebé se puso rojo y comenzó a vomitar profusamente.

Jack y Shane notaron a la anciana presa del pánico y al principio pensaron que solo se le había cerrado el auto. Pero de todos modos decidieron investigar.

"Hay un bebé atrapado en el auto", gritó. Sin dudarlo, los dos atletas se pusieron en acción. Uno de ellos tomó el martillo y, con un solo golpe, quebró la ventanilla y abrió la puerta del automóvil.

"Le salvaron la vida", le dijo Teresa a Grifton Sports Insider. "Estoy eternamente agradecida con ellos. No puedo imaginar la vida sin mi nieto".

Teresa y su esposo fueron a ver el partido, como lo prometieron, y llevaron a Liam, quien estaba fascinado con el evento deportivo.