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Raro tumor ovárico que hasta tenía dientes hace actuar a joven como poseída por el demonio

Vanessa Guzmán
14 ago 2018
23:20

Elaine Sage asumió que su hija Aimee tenía una infección cuando tenía fiebre, pero pronto le estaba diciendo a su aterrorizada familia que necesitaba planificar su propio funeral.

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Los médicos descubrieron un tumor del tamaño de una mandarina en su ovario, llamado teratoma. Se descubrió que el crecimiento similar al "caracol marino" tiene dientes, cabello y células cerebrales.

Y el crecimiento había engañado al sistema inmune de Sage para que atacara su cerebro. La adolescente pasó su cumpleaños número 18 en cuidados intensivos luego de que el tumor la hiciera actuar como si estuviera "poseída", reseñó Daily Mail.

Elaine Sage, de Ashford, Kent, supuso que su hija Aimee tenía una infección viral cuando su temperatura se disparó.

Pero la adolescente se quedó gritando histéricamente y contándole a su aterrorizada familia que necesitaba desesperadamente planificar su propio funeral.

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El crecimiento extraño había engañado a su sistema inmune para que atacara su cerebro, cambiando por completo su personalidad.

Escribiendo en el diario que mantuvo a lo largo de la dura prueba de su hija, la Sra. Sage describió el crecimiento como un "caparazón de mar peludo".

Al dibujar un boceto porque no le permitieron tomar una foto, ilustró el cabello negro que sobresalía en la parte superior, con los dientes debajo de la superficie.

Hablando por primera vez sobre la aterradora experiencia de su hija, la Sra. Sage dijo: "Fue como tener una hija diferente.

"Estaba escribiendo en el aire con el dedo en un aturdimiento en un momento, luego gritando histéricamente y saltando sobre la cama al siguiente. Era como una escena de película de terror, era como si estuviera poseída".

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"Incluso trató de escapar del hospital porque estaba segura de que estaba siendo amenazada y no se sentía segura. Me rompió porque es la chica más amable y gentil, pero verla así, en ese estado, fue tan horrible para todos nosotros".

La señorita Sage, estudiante de guardería, comenzó a padecer de dolor de garganta el 27 de mayo. A la mañana siguiente, tenía una temperatura de 39° C, había comenzado a estar enferma y su presión arterial estaba por el techo.

Pensando que era una infección viral, Sage, una compradora en línea de Tesco, cuidó a su hija en la cama y esperaba que pronto se recuperara. Pero por la tarde su comportamiento comenzó a empeorar.

La Sra. Sage dijo: "Ella seguía diciéndome que no entendía, cuando estaba tratando de contarle cosas simples como dónde podría empezar a buscar un nuevo trabajo cuando se sintiera mejor. Al principio pensé que estaba siendo gruñona, una típica adolescente, desinteresada en lo que decía su madre".

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LA CHICA EMPEORÓ MUY RÁPIDO

Pero esa noche, la señorita Sage, que tiene dos hermanos menores, la estudiante Demi, de 20 años, y Harrison, de ocho, se volvió errática y enojada.

La Sra. Sage, casada con Lee, dijo que recordó: "Estaba paseando por su habitación con un cepillo para el pelo en la mano y le preguntaba: "¿Dónde está papá?".

"Luego dijo que no se sentía bien y que debería estar planeando su funeral. Estaba aterrada. Traté de calmarla pero nada parecía funcionar. Llamé a Lee que estaba en un turno de tarde en el trabajo. Le pidió a un amigo de la familia que viniera y, cuando lo hicieron, también quedaron tan conmocionados por lo frenética que estaba Aimee. Fue entonces cuando me di cuenta de que necesitaba llamar a una ambulancia".

Cuando llegó la ambulancia, los paramédicos dijeron que estaba teniendo un episodio psiquiátrico y la llevaron al Hospital William Harvey de Kent.La Sra. Sage dijo: "Gritaba y gritaba, pero momentos después dijo: 'Estoy bien... me siento fresca'. Como su madre, sabía que ella no tenía razón".

Después de tres días de pruebas y monitoreo, la Srta. Sage fue transferida al departamento de neurología de Kent y al Hospital de Canterbury en Canterbury.

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Mientras tanto, los médicos llevaron a cabo análisis de sangre y escáneres corporales completos para tratar de llegar al fondo de sus síntomas.

Después de 10 días, los médicos dijeron que habían encontrado un tumor en el ovario derecho, lo que podría proporcionar las respuestas para su cambio de comportamiento drástico. Lo diagnosticaron como un teratoma ovárico, y las pruebas mostraron que contenía dientes, cabello e incluso células cerebrales.

Los tumores raros se desarrollan apartir de células germinales, que crean óvulos humanos y pueden formar pelo, dientes y huesos.

Los médicos afirmaron que el tumor producía un anticuerpo contra el receptor NMDA, que ayuda a controlar los pensamientos, estados de ánimo y movimientos de una persona, compartió The Sun.

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Las pruebas mostraron que la señorita Sage tenía el anticuerpo en la sangre y su comportamiento extraño era causado por la condición resultante, encefalitis anti-NMDAR.

Efectivamente, su sistema inmune estaba atacando su cerebro. La enfermedad causa síntomas psiquiátricos como convulsiones, confusión y pérdida de memoria, así como conductas extrañas y, a menudo, perturbadoras, como ver cosas que no existen, desarrollar creencias extrañas o parecer agitado.

Debido a la gravedad de su comportamiento, la chica fue puesta en coma inducido el 15 de junio. Cuatro días después, le extirparon el tumor en el ovario derecho y extrajeron las trompas de Falopio en una operación de tres horas en el Queen Mother Hospital de Margate, donde fue trasladada para la cirugía.

Inconsciente durante 12 días en total, la aterrorizada familia mantuvo una vigilia junto a su cama. Luego, el 27 de junio, el día antes de su gran cumpleaños, salió de su coma, todavía confundida y perturbada.

Y el 28 de junio, cuando la mayoría de los adolescentes tomarían su primera bebida alcohólica legal, ella no estaba en condiciones de celebrar cumplir 18 años. En cambio, estaba sedada y apenas consciente de dónde estaba.

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¿QUÉ SON LOS TERATOMAS OVÁRICOS?

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Los teratomas ováricos provienen de células germinales, que forman óvulos humanos y pueden crear cabello, dientes y huesos, entre otras estructuras. Se cree que están presentes al nacer, pero a menudo no se descubren hasta más tarde en la vida.

Son una forma rara de tumor de células germinales y generalmente se diagnostican en niñas y mujeres jóvenes hasta los 20 años.

Se clasifican como inmaduros porque las células cancerosas se encuentran en una etapa muy temprana de desarrollo o son maduras (también conocido como quiste dermoide) porque el crecimiento es benigno.

La mayoría de los teratomas inmaduros del ovario se curan, incluso si se diagnostican en una etapa avanzada.

Después de realizar una traqueotomía, en la que se crea una abertura en la parte frontal del cuello para insertar un tubo en la tráquea, la señorita Sage se conectó a un ventilador y goteó varias veces.

La Sra. Sage dijo: 'Ella no recuerda nada de eso. La mayoría de los jóvenes de 18 años no pueden recordar su 18º porque bebieron demasiado, pero ella no lo recordará porque estaba muy enferma. Estaba sentada llorando, pensando que estaba muerta. Pero aún quería que ella tuviera un día especial. Así que llevamos globos y regalos para que se sintiera como en una fiesta adecuada. Sentí que todo estaba siendo arrancado de ella".

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Sin embargo, después de su cumpleaños, la adolescente se recuperó lentamente y nueve semanas después de la primera enfermedad, el 26 de julio fue dada de alta del hospital.

Desde entonces, ha tenido que aprender a caminar de nuevo y todavía no puede recordar su terrible experiencia, pero está decidida a volver a su antiguo yo otra vez.

La señora Sage dijo: "Lo último que Aimee recuerda es que vio a los médicos, pero después de eso todo es muy vago. Ahora quiere volver a ser como cualquier otra persona de 18 años".

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LOS DOCTORES LA TRATARON POR ESTRES, PERO ERA UN TUMOR CEREBRAL

Chelsea Yeomans vivió una experiencia aterradora y profundamente frustrante al ser ignorada por todo el personal médico.

Chelsea Yeomans, ahora de 23 años, sufría de dolores de cabeza y mareos, pensando que se trataba de efectos secundarios del estrés y las hormonas. La joven mujer sufría de debilitantes dolores de cabeza, y terminó arriesgándose a quedar paralizada luego de un mal diagnóstico.

Los doctores pensaron que se trataba de estrés, pero en realidad, era un tumor cerebral. Chelsea comenzó a tener terribles jaquecas a los 13 años, además de mareos, y eso siguió hasta que presentó sus pruebas para ingresar a la universidad.

Los doctores dijeron que el dolor se debía al estrés y sus hormonas adolescentes, recetándole paracetamol, según reporta el diario Mirror. Pero el dolor siguió, y Chelsea se convenció de que sufría de algo más serio, así que buscó sus síntomas en Google. Los resultados sugerían un tumor cerebral.

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