Leona se encuentra con su rescatista por primera vez en 7 años

Una leona que no había visto a su padre humano durante siete años estuvo extasiada cuando las puertas se abrieron y pudo poder abrumarlo con un montón de abrazos y besos del tamaño de un león.

En un video de YouTube, se puede apreciar a Kiara, (nombrada así por el personaje del "Rey León" ) una leona que sin duda hace honor a su nombre con elegancia, fuerza y ​​amor.

La reacción de la felina al ver a su antiguo padre adoptivo después de tanto tiempo, deja a cualquier con una gran sonrisa en los labios, pues no pudo contener la emoción dentro de ella.

Adolfo, que había criado a Kiara desde cachorra, fue golpeado de frente con los abrazos monstruosos de la gata gigante. No pasó mucho tiempo antes de que el hombre se tirara al césped para que Kiara pudiese darle todo su amor bestial.

UN REENCUENTRO DE PELÍCULA

El el clip se aprecia como Adolfo estaba igualmente feliz de jugar de nuevo con su antigua amiga gatuna. El domador devolvió todos los abrazos e incluso juegueteó con Kiara en una reconfortante exhibición llena de ternura.

Si bien tales criaturas a menudo son potencialmente peligrosas, es posible entrenarlas para evitar cualquier daño a los humanos. Luego de haber pasado por una crianza con personas, como fue el caso de Kiara, es posible disfrutar de cerca con estos increíbles animales.

AL PARECER LOS LEONES DISFRUTAN MÁS DE LOS HUMANOS QUE EL RESTO DE SUS PRIMOS GATUNOS

En Crimea, Rusia, es posible disfrutar un safari dentro de un parque, para estar en contacto con leones como Filya, una atrevida felina que no solo se acercó a los turistas, también entró al vehículo donde viajaban y se puso cómoda en el asiento de conductor mientras amistosamente interactuaba con los presentes.

La actitud de Filya era tan agradable que aun siendo lámidos por ella, ningún pasajero reaccionó con temor ante la cercanía de la enorme gata. El conductor de la camioneta tuvo que empujar a la leona fuera del vehículo para poder continuar con el recorrido.

Mientras se alejaban, la poderosa animal no hizo más que vigilarlos. Y aunque que los turistas podrían haber pensado que acariciar a Filya era algo divertido, en realidad también era muy peligroso, ya que los leones no son mascotas. Sin embargo, es conmovedor ver como el amor es un lenguaje universal, sin importar la especie.