Enorme gorila encuentra a pequeño bebé en bosque y el lazo que forjan rápidamente se hace viral
Esta es una amistad poco probable entre el primate más grande de todos, y uno de los más pequeños.
Bobo, un gorila de las tierras bajas occidentales, vive en el santuario de primates de Mefou, en Camerún, con más de 300 animales rescatados.
El santuario protege a los simios en peligro de extinción de los cazadores furtivos, y Bobo es uno de ellos.
El gran gorila creció como un huérfano, pero él es una criatura amable y compasiva, como lo demostró en este evento.
Una publicación en Facebook de Ape Action Africa mostró imágenes que destacan a Bobo como un fortachón de 440 libras, pero con buenos sentimientos.
Fuente: Facebook / ApeActionAfrica
"Los cuidadores lo descubrieron acunando al pequeño primate durante sus chequeos matutinos, y se sorprendieron al verlo manejándolo con el mayor cuidado", posteó Ape Action Africa en Facebook, en agosto pasado.
BIG BOBO ES EL GORILLA DOMINANTE
Bobo es el macho dominante en su grupo, pero llegó al santuario en 1994, cuando tenía dos años, después de que su madre fuera asesinada por cazadores furtivos.
Una mañana, los cuidadores del santuario se sorprendieron al ver que Bobo estaba acunando suavemente a una diminuta criatura en sus manos. Era un Galago, también conocido como un bushbaby, cuya especie es la más pequeña entre los primates.
Fuente: Facebook / ApeActionAfrica
UNOS CHICOS JUGUETONES
La minúscula criatura de la que Bobo se había hecho amigo es un insectívoro nocturno que pesa apenas 200 gramos y no es más alto que el pulgar del gorila.
Fuente: Facebook / ApeActionAfrica
UNA AMISTAD HECHA EN EL CIELO
Los cuidadores se asombraron al ver que la cría no temía a Bobo, se alejaba dando un paseo por la hierba y luego regresaba para trepar al cuerpo de su amigo gigante.
Fuente: Facebook / ApeActionAfrica
BOBO PROTEGIÓ AL GALAGO DE LA CURIOSIDAD DE LA BANDA
Los otros gorilas vieron al bushbaby y también querían jugar, pero Bobo protegió a su frágil amigo de su curiosidad, dejándolos mirar pero no tocar. Dos horas después, Bobo llevó a su amigo a los árboles y lo liberó.
OTRA PAREJA DISPAREJA
Lejos de Bobo, en su santuario africano en Camerún, otro par de amigos poco probables se unieron para un entrenamiento matutino en Estados Unidos.
Busch Gardens, en Tampa, Florida, compartió un video que muestra a su gorila, Bolingo, ++trabajando++ con su entrenadora Rachel Hale.
En el video, se puede ver a Bolingo copiando los movimientos de Hale y uniendo manos y pies a través del cristal.
Esta capacitación les permite a los empleados construir confianza con los animales y crea un vínculo especial. El ejercicio de Hale y Bolingo ha sido visto casi 200.000 veces.
En una historia relacionada, un niño que cayó en un recinto de gorilas en el zoológico de Jersey fue protegido por un macho gigante plateado hasta que llegaron los rescatistas.