Madre de 4 tiroteada a muerte mientras su hija dormía en otra habitación
Una madre de cuatro hijos de 31 años falleció luego de recibir un disparo en el torso dentro de su casa en Geelong, Australia.
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El personal médico de emergencia llegó a la casa de Emily Miller en Conrad Court alrededor de las 9:20 p.m. el 21 de noviembre. En el lugar encontraron a la mujer herida, aferrada a la vida.
Ella fue llevada de inmediato al hospital. Desafortunadamente, falleció horas después debido a sus heridas.
Muchos de sus amigos fueron a las redes sociales para expresar el dolor por la muerte de Miller.
Uno de los miembros de la familia de Miller habló con el Daily Mail y dijo: "Me duele el corazón por sus hijos".
Mientras que su amiga, Bliss Tannenberg, compartió que todos estaban devastados y conmocionados cuando se enteraron de la muerte de Miller.
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La madre y el hermano de la mujer hablaron con 9News donde también expresaron su tristeza por la pérdida.
La madre de Miller, Doreen Forehan, dijo: "Ella es una madre amorosa y eso es todo lo que importa. Ella no se merecía esto. Es simplemente horrible. No hay que olvidar que hay cuatro niños pequeños inocentes en esto que han perdido a su madre, por lo que es simplemente devastador".
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En cuanto a su hermano, Trent Forehan, la describió como alguien que siempre estaba llena de energía.
Según los informes de 7News, uno de los hijos de Miller, un niño de 18 meses dormía en la otra habitación cuando ocurrió el incidente.
Los agentes de policía se apresuraron a investigar la escena del crimen y habían estado buscando el arma desde el 22 de noviembre de 2018.
El mismo día, las autoridades pusieron a un hombre de 25 años bajo custodia. Se suponía que era el novio de Miller y que estaba en casa en el momento del incidente.
Al día siguiente, la policía declaró que había arrestado al hombre y lo acusó de posesión ilegal de armas de fuego, tráfico de heroína y posesión de heroína.
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A partir de ahora, los detectives todavía están investigando el caso.
En otra historia, la policía informó que tres personas murieron en un caso de asesinato-suicidio en Belle Meade, Tennessee.
Las autoridades revelaron que Gail Andrews Miller, de 65 años, asesinó a su madre, Rachel Andrews, de 97 años, y a su hermana, Barbara Andrews, de 68 años, antes de suicidarse.
La policía aún encontró viva a Gail cuando llegó, pero murió antes de que la ambulancia llegara a la escena del crimen.
En cuanto a Barbara, ella ya estaba muerta cuando la policía la encontró, pero su madre, Rachel, todavía estaba viva y murió cuando llegó al hospital.
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