Niño pierde batalla contra el cáncer a horas de que sus padres pidieran ayuda para el tratamiento

El tener cáncer siempre es una situación difícil de describir para cualquiera, tanto pacientes como familiares, pero si el paciente es un niño la situación se torna mucho más complicada.

Luke Bell era un niño de 8 años que emprendió una batalla contra el cáncer desde hace un año cuando se le diagnosticó una forma extraña de la terrible enfermedad, esta se conoce como neuroblastoma.

El niño se sometió a quimioterapias y a una cirugía para remover el tumor cercano a su riñón, todo esto lo llevó a vencer al cáncer después de unos meses, para la alegría de Mark y Becky Bell que pensaron que la pesadilla que comenzó meses antes, había culminado.

LA SITUACIÓN CAMBIÓ

Luego de un par de meses, la tragedia nuevamente tocó la puerta de los Bell, el cancer habia vuelto al cuerpo del pequeño Luke, y no solo eso, se había extendido hacia los huesos.

“Nos habían dicho que solo le quedaban semanas de vida. Algunos meses, en el mejor de los casos”, contaron sus padres, señaló Vitalistas.

Esta vez los doctores lo desahuciaron, pero los padres del niño no se rendían, investigando sobre posibilidades para Luke consiguieron la oportunidad de someterlo a un tratamiento experimental en el Pediatric Cancer Center del Hospital Sant Joan de Déu de Barcelona, España.

Sin embargo para tener esta posibilidad los padres necesitaban la cantidad de 170.000 dólares, una cifra complicada para recaudar pero Mark y Becky no se iban a rendir con su hijo.

Los padres de Luke al ver que les quedaba poco tiempo y solo tenían 120.000 dólares decidieron hacer un llamado especial para conseguir los 50.000 dólares que faltaban para el costoso tratamiento.

EL TIEMPO NO ALCANZÓ

Al poco de hacer el llamado especial para lograr el dinero que faltaba Luke perdió la batalla contra el cáncer luego de más de un año de lucha.

“No podemos describir el dolor de nuestros corazones. Falleció de manera tranquila, en su lugar favorito y rodeado por las personas que más quiso”, comentaron sus padres.

“Esta última batalla ya era demasiado dura. Ayer por la noche nuestro mundo cambió para siempre. Nuestro pequeño superhéroe ya no se encuentra con nosotros”, finalizaron sus declaraciones los padres del niño a través de un comunicado, reportó The Sun.

Luke falleció en los brazos de sus seres queridos, como él lo deseaba, así como el niño Joshua que también falleció de cáncer en brazos de su madre luego de cumplir su último deseó, una fiesta de Navidad.