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4 poderosas oraciones que pueden ayudarte cuando sientas desesperación

Stef Colina
27 abr 2019
12:38

Si las malas situaciones te sobrepasan o te sientes angustiados y crees en la divinidad hay cuatro santos a los que puedes hacerles llegar tu petición, San Judas Tadeo, Santa Rita de Casia, San Gregorio Taumaturgo y Santa Filomena, los patronos de las cosas imposibles o desesperadas.

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Cada uno de ellos se dedicó a una vida de peregrinación entregado a ayudar a los más necesitados, por ejemplo Santa Rita de Casia estuvo al cuidado de los enfermos de peste y por esa causa se le catalogó como la santa de lo imposible. Por otra parte, San Judas Tadeo es uno de los doce apóstoles que acompañó a Jesucristo en su peregrinación en la tierra.

Santa Filomena fue una joven mártir a la que torturaron y olvidaron, no fue hasta 1802 cuando hallaron su tumba que recordaron su historia, por último San Gregorio Taumaturgo quien se dedicó a la vida sacerdotal desde la adolescencia fue un obispo que realizó un sin número de milagros. A continuación te mostramos 4 oraciones que te ayudarán en lo que necesitas.

Persona rezando / Imagen tomada de: Freepik

Persona rezando / Imagen tomada de: Freepik

ORACIÓN A SANTA RITA DE CASIA

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Bajo el peso del dolor, a ti, querida santa Rita, yo recurro confiado en ser escuchado. Libera, te ruego, mi pobre corazón de las angustias que lo oprimen y devuelve la calma a mi espíritu, lleno de preocupaciones.

Tu que fuiste elegida por Dios como abogada de los casos más desesperados, obtén la gracia que ardientemente te pido [pedir la gracia que se desea].

Si mis culpas son un obstáculo para el cumplimiento de mis deseos, obtenme de Dios la gracia del arrepentimiento y del perdón mediante una sincera confesión.

No permitas que durante más tiempo yo derrame lágrimas de amargura.

Oh, santa de la espina y de la rosa, premia mi gran esperanza en ti, y en todas partes daré a conocer tu gran misericordia con las almas afligidas.

Oh Esposa de Jesús Crucificado, ayúdame a bien vivir y a bien morir. Amén.

Persona orando / Imagen tomada de: Freepik

Persona orando / Imagen tomada de: Freepik

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ORACIÓN A SAN JUDAS TADEO

¡Santo Apóstol, san Judas fiel siervo y amigo de Jesús! El nombre del traidor que entregó a tu amado Maestro en las manos de sus enemigos, ha sido la causa de que tú hayas sido olvidado por muchos; pero la Iglesia te honra e invoca universalmente, como el patrón de los casos difíciles y desesperados.

Ruega por mí. Estoy sin ayuda y tan solo… Haz uso, te imploro, del privilegio especial a ti concedido, de socorrer pronto y visiblemente cuando casi se ha perdido toda esperanza.

Ven en mi ayuda en esta gran necesidad, para que pueda recibir consuelo y socorro del cielo en todas mis necesidades, tribulaciones y sufrimientos, particularmente (haga aquí su petición), y para que pueda alabar a Dios contigo y con todos los elegidos por siempre.

Prometo, glorioso san Judas, nunca olvidarme de este gran favor, honrarte siempre como a mi especial y poderoso patrono, y, con agradecimiento hacer todo lo que pueda para fomentar tu devoción.

Amén.

Persona rezando / Imagen tomada de: Freepik

Persona rezando / Imagen tomada de: Freepik

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ORACIÓN A SANTA FILOMENA

¡Oh, gloriosa santa Filomena, Virgen y Mártir!, ejemplo de fe y esperanza, generosa en la caridad, a Vos suplico, escuchad mi oración. Desde el cielo donde reináis, haced caer sobre mi toda la protección y auxilio que necesito en este momento en que mis fuerzas flaquean. Vos que sois tan poderosa junto a Dios, interceded por mí y alcanzadme la gracia que os pido (menciona la gracia que desea recibir).

¡Oh, santa Filomena!, ilustre por tantos milagros, rogad por mí. No me abandonéis, jamás dejéis de mirar como un rayo de esperanza sobre mí y mi familia. Apartad de mí las tentaciones, dad paz a mi alma y bendecid mi casa. ¡Oh santa Filomena!, por la sangre que derramaste por amor a Jesucristo, alcanzadme la gracia que os pido (repita ahora su petición).

(Rezar un Padrenuestro, Avemaría y Gloria)

Santa Filomena, ayudadme a alcanzar la gracia. Te prometo que seré tu devoto y que manifestaré a otros necesitados lo milagrosa y bondadosa que eres. Amén.

Persona rezando / Imagen tomada de: Freepik

Persona rezando / Imagen tomada de: Freepik

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ORACIÓN A SAN GREGORIO TAUMATURGO

Haced, oh Dios omnipotente, que la augusta solemnidad del bienaventurado Gregorio, vuestro confesor pontífice, aumente en nosotros el espíritu de piedad y el deseo de la salvación. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.

(Si no quieres salir de casa sin recibir la bendiciòn de Dios, debes leer la siguiente oración de las mañanas para que te sientas a salvo de la mano de Dios)

Jesús,

Me desperté hoy y recordé que todavía estás en el trono. Estás muy vivo, aún resucitado y victorioso sobre la muerte.

Los ángeles y los ancianos no han dejado de alabar. Nada ha cambiado, todavía eres el Señor de todo.

Me desperté esta mañana y descubrí que todavía me amas. Todavía te importa; Estás listo para llevar mi carga hoy. Estás preparado para elevarme más alto que mis circunstancias, porque eres más grande y más alto y más alto que cualquier montaña que yo enfrente.

Persona rezando / Imagen tomada de: Freepik

Persona rezando / Imagen tomada de: Freepik

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Entonces, Jesús, levántame por encima de la lucha a la que me enfrento hoy mientras fijo mis ojos en estas Verdades, mientras te adoro en el trono, mientras me siento contigo, gobernando y reinando en la vida contigo.

Me desperté esta mañana y recordé que el diablo sigue siendo un enemigo derrotado, aunque energizado por el pecado y el odio. En última instancia, no puede ganar porque ya has ganado todas las victorias en mi nombre.

Me desperté esta mañana y tus promesas me hicieron señas. No expiraron de la noche a la mañana. Todavía están disponibles; siguen siendo verdad, nunca se vuelven inválidos. Ninguna promesa ha perdido una onza de relevancia para mí. Ninguna de tus preciosas promesas está fuera de mi alcance. Si me mantengo fiel a mi compromiso de amarte y adorarte y obedecerte (por favor concede tu gracia y misericordia), disfrutaré las bendiciones de cada una de tus promesas.

Me desperté esta mañana para decir todavía ...

¡Eres bueno!

Y tu amor perdura para siempre.

Entonces, con tu amor perdurable, soportaré todo lo que se me presente con una canción de alabanza en mis labios y gratitud en mi corazón a Aquel que me hizo, el que me ama.

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Amén

La fe es sumamente importante a la hora de leer estas oraciones desesperadas, porque solo desde allí podrás llegar tu petición hasta el mismísimo Dios.

La oración desesperada en tiempos de necesidad es primordial, no debes olvidar que mientras más afligido este tu corazón mejor será la recompensa a tu petición.

Persona orando / Imagen tomada de: Freepik

Persona orando / Imagen tomada de: Freepik

ORACIÓN HERIDA EN EL HOMBRO DE JESÚS

Oh, amado Jesús, manso Cordero de Dios, yo, un pecador miserable, saludo y adoro la herida más sagrada de Tu hombro, en la que soportaste Tu pesada cruz, que arrancó Tu carne y depositó tus huesos para infligir una angustia mayor que cualquier otra.

Otra herida de tu cuerpo más bendito. Te adoro, oh Jesús más triste. Te alabo y te glorifico, y te doy gracias de lleno a ti por la herida más santa, sagrada y dolorosa. Suplicándote por ese dolor excesivo y por la carga aplastante de tu pesada cruz para ser misericordioso conmigo hacia el cielo en el camino de tu cruz.

En el nombre de Jesús (solicite Amén a todos).

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