Joven con retraso madurativo es estafado para quitarle las 12 casas que recibió como herencia

Un joven con discapacidad fue engañado por un vecino, quien le robó la herencia que su madre adoptiva le dejó tras una muerte violenta.

Roberto Sartaja, de 24 años, perdió a su madre adoptiva el 21 de agosto de 2009. Ana María Fontana era una docente jubilada de 67 años y fue asesinada en su casa durante un supuesto robo.

El joven era el único heredero de unas propiedades avaluadas en cerca de 1 millón de dólares. En total eran 2 autos y 12 propiedades.

UN BLANCO FÁCIL

Sin embargo, Roberto, quien padece un retraso madurativo, no tenía claro de la importancia de los bienes que había heredado. Eso lo convirtió en un blanco fácil para tres estafadores que le robaron todo lo que su madre le dejó.

Los acusados por el hecho son un escribano, un abogado y un vecino del joven. Este último se ganó la confianza de Roberto, aprovechando su vulnerabilidad, y después consiguió no solo que lo dejara vivir en una de las casas sino que le firmara un poder para traspasar las propiedades.

El hombre que tenía un carro de panchos utilizó los servicios del abogado Daniel González, quien quedó con una de las propiedades a nombre de su esposa, y el escribano Agustín Ojeda para legalizar todos los traspasos ilegales.

"En esto es central la figura de Diego Armocida, un vecino de Roberto, quien logró ganarse su confianza y llegar incluso a que lo autorice a vivir en su chacra", explicó el fiscal Moyano, a la agencia Télam. La estafa ocurrió en la localidad chubutense de Gaiman, ubicada a 40 kilómetros al oeste de Rawson.

SE APROVECHARON DE SU CONFIANZA

Y añadió: "A Roberto le hacen firmar papeles sin que él tuviera conocimiento de lo que estaba haciendo, se aprovecharon de cierto retraso madurativo que tiene y de un alto nivel de confianza hacia las personas que lo hacen vulnerable, cosa que logramos acreditar con el trabajo de las psicólogas forenses que actuaron".

Los acusados por el hecho son un escribano, un abogado y un vecino del joven.

Por su parte los imputados intentaron llegar a un acuerdo con las autoridades ofreciendo devolver parte de las propiedades. El juez de primera instancia rechazó el ofrecimiento por considerarlo absurdo.

Es lamentable que algunas personas en condiciones de vulnerabilidad y soledad se topen con gente sin escrúpulos que no pretende ayudarles sino más bien aprovecharse de la situación.

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