Jueza argentina es sancionada por maltratos y por quemar causas en una parrilla del juzgado

En Argentina, una juez que generó mucha polémica por sus desafortunados comentarios y desdeñosas acciones en la corte contra víctimas de violencia doméstica ha sido sancionada.

Julieta María Ormaechea, titular del Juzgado de Paz de San Vicente, Argentina, ha sido sancionada con una suspensión de 90 días luego de incurrir en repetidos maltratos y abusos en contra de víctimas de violencia doméstica que presentaron denuncias ante su corte, así como por "actuar de manera inapropiada", al haber quemado expedientes de denuncias en una parrilla en el juzgado.

"Señora, somos grandes ¿Usted es tarada? ¿Es mogólica? ¿Es discapacitada?... Vuelva con él y déjese de molestar", habría sido la infame cita que hizo viral a la jueza. A la víctima no sólo no se le ratificó la denuncia, sino que se quemó el expediente, evitando así los "requisitos dilatorios y burocráticos" que contempla el sistema para proteger a los denunciantes.

Abogados de la región manifestaron que este tipo de conductas por parte de Ormaechea no son cosa nueva ni inusual, y que la sanción no ha sorprendido a nadie.

"Es una maltratadora serial. Tarde o temprano le iban a poner un punto a esta situación porque tenía muchas denuncias", afirmó un abogado del distrito al Diario Sur. Ante las acusaciones de insultar a víctimas y quemar los expedientes, manifestó que su historial es tan pronunciado que la censura "podría haber pasado diez años atrás".

"Está loca. Tenía manejos completamente arbitrarios y demoraba todos los trámites. A tal punto que ningún abogado quería litigar en su Juzgado y por eso todas las denuncias se presentan en La Plata”, contó otro profesional especializado en derecho laboral. “Muchos de los empleados se terminaron yendo o pidieron licencia porque no aguantaban tanto maltrato."

La jueza, de 56 años de edad, ha ejercido su cargo desde 1996, tras recibir el apoyo de Antonio Arcuri, político de influencia en la región en aquel entonces.

Su relación con los líderes políticos y los vecinos de la zona rápidamente empeoró tras obtener su cargo. También fue el caso de su relación con el ayuntamiento local, negándose a reunirse con funcionarios ni intendentes.

No sólo bloqueaba las investigaciones sobre violencia de género, sino también varios juicios por apremios contra grandes deudores al fisco. Estas irregularidades llevaron a sus colegas y funcionarios a colaborar con la Justicia para que procediera la investigación y sanción.

Como resultado, la Subsecretaría de Control Disciplinario de la Corte Suprema Bonaerense decidió suspender a Ormaechea por 90 días.

Posteriormente, un comité decidiría si sería removida del cargo del todo.

En otro indignante caso, un hombre golpeó a su mujer en la cara y la dejó sin olfato, pero un juez redujo su pena por ser "sin intención".