El Supremo avala que una mujer desherede a sus hijos que la menospreciaron y maltrataron

Madre solo hay una, pero parece que no todos saben apreciar a la que se supone es la persona más especial e importante en la vida de cada uno. Los malos tratos recibidos en vida fueron regresados a dos de sus hijos en España.

A medida que van pasando los años, una mujer ha recibido menosprecios y maltratos de parte de sus hijos, al punto que llevó el tema a la justicia porque quiere dejarlos fuera de su testamento, en retribución a su inapropiado comportamiento y el Tribunal Supremo español la está apoyando.

Dos de sus hijos pidieron ser incluidos en el testamento, al igual que lo está su otro hermano. Este caso fue a la Audiencia Provincial de Vizcaya y luego al Tribunal Supremo. La decisión final ha dado apoyo y respaldo a la madre, en vista de que ellos abandonaron a su familia, señala un reporte de La Sexta.

La afectada madre señaló que recibió maltratos por parte de ellos buena parte de su vida, especialmente cuando enfermó y quedó en silla de ruedas.

Ante esto, las dos instancias legales a las que recurrieron determinaron que "ambos hermanos incurrieron en una conducta de menosprecio y abandono familiar respecto de su madre, sin justificación alguna y sólo imputable a los mismos".

En el testamento, de fecha 3 de agosto de 2009, señala "que su hijo Francisco Javier le ha manifestado reiteradamente que está llena de maldades y brujerías y que la casa, igual que ella, está también embrujada y llena de maldades".

También aprovecha el documento legal para denunciar que "su hijo Jorge le atribuye la responsabilidad de todos los males que, según él, ha padecido en la vida y le niega formal y expresamente su condición de madre, careciendo de interlocución alguna con él, hasta el punto de haber intentado la testadora felicitarle el día de su cumpleaños y sufrir el desplante de que le colgara el teléfono".

ESTAFAN A MUJER Y DEJAN A FAMILIA SIN HERENCIA

Joan Blass de 91 años inició amistad con un hombre 23 años menor que ella. Cuando él se mudó a su casa, comenzaron las evidentes preocupaciones de la familia, pues entre otras cosas, ella había sido diagnosticada con demencia severa.

Lo peor estaría por llegar. Blass, viuda, se había casado secretamente con él, identificado como Colman Folan.

Ese matrimonio anuló de inmediato el testamento y los hijos tuvieron hasta que demandar al hombre para poder organizar el funeral de Joan.