Eduardo Yáñez: la historia de amor y sufrimiento del actor y su fallecida madre
El actor mexicano pasa por un duro momento tras la muerte de su madre, quien enfrentó una cruda realidad para sacar adelante a su hijo.
María Eugenia Luévano, madre de Eduardo Yáñez, falleció el pasado 23 de febrero a los 82 años de edad y desde entonces, el histrión sufre la pérdida de su ser amado.
El actor y su madre tenían una estrecha relación unida por un fuerte lazo que se formó desde que el 25 de septiembre de 1960, llegó al mundo Eduardo y se comenzó a tejer la historia de amor entre ambos.
EL DOLOR QUE TUVIERON QUE EXPERIMENTAR
María Eugenia era celadora en el Palacio Negro de Lecumberri y debido a su trabajo, Eduardo tuvo que pasar gran parte de su niñez, envuelto en el ambiente de la temida cárcel mexicana.
Aunque su relación con su madre guarda gratos recuerdos llenos de amor, también retiene sufrimiento.
Víctima de la pobreza y los abusos, María Eugenia tuvo que trabajar en dicha penitenciaría para poder sacar adelante a su hijo, pues muy poco se sabe del hombre que la embarazó.
Yáñez creció sin la figura paterna y en medio de circunstancias trágicas que veía y experimentaba entre las paredes del penal más famosos de México que fue cerrado en 1976.
ENTRE RECLUSAS, CELDAS Y POLICÍAS
Fue así como Eduardo creció entre reclusas, celdas y policías. Su madre, al no tener con quién dejarlo se lo llevaba al trabajo.
En una entrevista concedida en 2011 a Aurora Valle y compartida (un extracto) por Univisión recientemente, Eduardo dijo que siempre fue bien tratado por las presas y los que hacían vida en la cárcel.
El artista dice que las imágenes observadas en aquella época quedaron grabadas en su mente y que son difíciles de olvidar y además, no quiere hacerlo.
Tanto María Eugenia, como Eduardo, tuvieron que lidiar con el ambiente de aquel oscuro lugar que se acuerdo a relatos, estaba rodeado de condiciones inhumanas y el abuso estaba a la orden del día.
Pero en medio de aquella cruda realidad, la relación entre madre e hijo se estrechaba cada día más, pero también, proporcionó algunas experiencias que quizá, han marcado la vida de Yáñez.
ESTABA ENAMORADO DE SU MADRE
El profundo amor que Eduardo sentía por su madre era tan grande, que en una confesión que hizo en Ventaneando, contó que estuvo enamorado de su mamá.
"Estaba yo enamorado de mi mamá. Cuando mi mamá ya no quiso que yo me bañara con ella, yo era un hombre de suicidio, ¿como si es mi mujer, es mi mamá?”, precisó el actor, quien dijo que eso ocurrió estando pequeño.
Incluso, Eduardo, ya siendo un adolescente la celaba de que estuviera con otros hombres y le reclamaba por no haber conocido a su padre.
Pero a pesar de los problemas enfrentados con su madre, Eduardo siempre estuvo ahí para ella.
Fue vendedor ambulante de gelatinas en las calles de la Ciudad de México, mesero y limpiador de zapatos. Todo eso para ayudarla con el sustento del hogar.
No fue sino hasta principio de los años 80, cuando Eduardo comenzó su carrera como actor, que la vida comenzó a sonreírle.
Con el paso de los años construyó una sólida carrera en el mundo del espectáculo, pero por momentos tuvo que alejarse para brindarle a su madre los cuidados que requería.
Incluso le compró un apartamento y contrato a una pareja para que se hiciera cargo de su madre mientras el cumplía compromisos profesionales.
Pero con los años y tras un accidente que doña ‘Maru’ tuvo en su hogar, se destapó un terrible secreto, resulta que la madre de Eduardo estaba siendo víctima de abuso por parte de sus cuidadores.
Tras el incidente, María Eugenia perdió el brazo por lo que el actor tuvo que recluirla en un asilo donde tuviera los cuidados que necesitaba.
El actor nunca dejó de tener muestras de amor hacia su mamá, pues a pesar de su fuerte temperamento, cada vez que hablaba de su madre, mostraba una dulce cara.
Él no fue un mal hijo y nunca sacará de su corazón a la mujer que le dio la vida y lo ayudó a salir adelante con mucho esfuerzo, a pesar de las limitaciones y de las adversidades que tuvieron que surcar.
El actor estuvo con su madre casi hasta su último momento, pues horas antes de su muerte, Eduardo la acompañó, como lo hizo el resto de su vida.
En su perfil de Instagram el actor le rindió homenaje a su madre con una emotiva galería fotográfica en la que aparece él con su progenitora.