El último mensaje de Tamara Falcó para Carlos Falcó: 'Eres el mejor padre que podría desear'

Horas antes del fallecimiento del marqués de Griñón, su hija Tamara Falcó publicó un emotivo mensaje en Instagram para honrarlo y celebrar la suerte de haberlo tenido como padre.

Por entonces Carlos Falcó se encontraba internado en Madrid, en el el Hospital Fundación Jiménez Díaz. Su gravísimo estado no era aún de público conocimiento.

El empresario, quien se hallaba casado con la exmodelo Esther Doña, había sido ingresado al centro de salud con un caso de coronavirus. Al momento del mensaje de su hija todavía se encontraba luchando por su vida.

La ganadora de Master Chef Celebrity, hija de la unión anterior de su padre con Isabel Preysler, tenía una excelente relación con el marqués de Griñón, quien no perdía ocasión para demostrar públicamente su cariño y admiración por ella.

En la publicación de Instagram, realizada el mismo viernes de su fallecimiento, puede verse al empresario mucho más joven y sonriente, alzando a la entonces pequeña Tamara para mirarla a los ojos.

Es visible en la enternecedora imagen el enorme cariño que se tienen padre e hija, que se contemplan embelesados y felices como si nada existiera alrededor, y como si ese momento de felicidad fuera eterno.

“Esta foto describe mi relación con mi Padre”, escribió allí Tamara, en lo que iba a ser un saludo por San José atrasado y terminó convirtiéndose en una triste despedida sin quererlo.

“Papi tú no tienes Instagram pero como siempre te enteras de todo lo que hago que sepas que te quiero y eres el mejor padre que jamás podría desear”, agregó, deseosa de llegar con sus palabras a él, quien en ese momento se hallaba internado.

La triste noticia del fallecimiento de Carlos Falcó a causa del coronavirus que azota al mundo habría de conocerse poco después, y Tamara ha guardado silencio en su cuenta de Instagram desde entonces.

La enfermedad, que no distingue fama ni cariño y tiene al mundo en estado de alerta, había tomado por sorpresa a la familia. La avanzada edad del marqués de Griñón, que se encontró con ella tras 83 años de una vida plena, lo convertía en un paciente de riesgo.