El Ken humano ya no existe: Jessica Alves comparte su nueva figura tras la transformación

Mostrando su nuevo cuerpo apenas cubierto con un pequeño traje de baño negro, Jessica, a quien muchos conocieron como Rodrigo, el Ken humano, presume cada euro invertido en ella.

Hace algunos meses, Jessica presumió sus fabulosas curvas, anunciando que había comenzado una transición de hombre a mujer.

Una estrecha cintura, tacones para lucir sus piernas y unas largas extensiones rubias predominan en su popular cuenta de Instagram que actualmente cuenta con más de 1.2 millones de seguidores.

ADIÓS KEN

Durante muchos años el brasileño Rodrigo Alves, de 38 años y residenciado en Londres, era reconocido por la cantidad de cirugías a las que había sometido su rostro y cuerpo para parecerse cada vez más a Ken, el único novio de la muñeca Barbie.

Sin embargo, todo cambio a principios de 2020, cuando decidió borrar todas las fotos de sus redes sociales, donde mostraba con orgullo su gran parecido con el muñeco, y reapareció con una imagen mucho más femenina y una nueva identidad, Jessica Alves.

"Tuve un procedimiento estético que me cambió la vida como parte de mi transición (...) me dejó con un trasero J.Lo y las caderas de Kim Kardashian", explicó Jessica, según cita ‘Daily Mail’.

Jessica confesó que finalmente se había descubierto a sí misma como una persona transgénero, por lo que decidió revertir algunas de las cirugías anteriores y realizarse más de 75 nuevos procedimientos por un monto estimado de 900 mil euros, para convertirse en mujer.

Entre los procedimientos a los que se ha sometido están la feminización de su rostro, remoción de la manzana de Adán, aumento de glúteos y senos, así como algunos otros detalles destinados a suavizar cada una de las partes de su cuerpo.

"Como hombre nunca me sentí sexy y tenía muy poca confianza, pero ahora como mujer me siento feroz y sexy y es un sentimiento abrumador", dice Jessica, según recoge ‘Mirror’.

En ese momento, no le habían extirpado sus órganos femeninos, y legalmente no había logrado conseguir una identidad de mujer.

Pese a esto, Jessica dijo sentirse feliz, realizada y muy agradecida con su familia, sin la cual nunca habría tenido el valor de convertirse en una sensual mujer transgénero.