Así fueron los orígenes humildes de Joe Biden: familia pobre, defecto del habla y récord académico mediocre
Aunque muy pronto se convertirá en uno de los hombres más poderosos del mundo, Biden debió trabajar arduamente para llegar hasta donde está, ya que tuvo unos inicios bastante humildes.
Joe Biden hoy es conocido por ser el presidente electo de Estados Unidos. Pero sus inicios fueron tan complicados que muy pocos habrían presagiado que llegaría a ser el mandatario del país norteamericano.
El político nació en el año 1942 y vivió sus primeros años de vida en una casa muy humilde al noroeste de Pennsylvania con un padre que tuvo que trabajar como vendedor de coches usados.
Su niñez estuvo marcada por las constantes burlas que recibía por parte de sus compañeros de clases debido a un defecto del habla que lo hace trastabillar palabras, una dificultad con la que sigue lidiando.
La vida de Biden mejoró un poco a nivel socioeconómico cuando tenía 13 años y su familia se mudó a Mayfield, Delaware, una comunidad de clase media.
Sin embargo, tuvo que llegar a lavar las ventanas de su escuela y limpiar jardines para ayudar a su familia a pagar la matrícula del prestigioso centro educativo St. Helena School.
Biden era un buen estudiante y tenía un gran interés por los deportes como el béisbol y el fútbol americano. Pero en la Universidad se preocupó más por socializar que por leer libros.
A pesar de esto Joe logró graduarse de la Universidad de Delaware, en Historia y Ciencias Políticas en el año 1965.
Más adelante Joe ingresó a la Facultad de Derecho de la Universidad de Siracusa. Aunque también tuvo algunos baches académicos, logró obtener su título en 1968.
Justo después de eso inició con su carrera política, pues se convirtió en miembro activo del Partido Demócrata.
Poco a poco Biden fue creciendo profesionalmente y dejado de lado su carrera de derecho para ejercer como político.
El político tuvo que hacerle frente a algunas tragedias como la muerte de su esposa y dos de sus hijos. Sin embargo, Joe Biden ha logrado vencer cada una de las dificultades que la vida le ha impuesto.