La vida de Alberto Chicote, de un desengaño amoroso a conocer a Javier Bardem

A pesar de su fuerte carácter, el cocinero admitió que ha sufrido por amor, al punto de llorar intensamente en su trabajo.

Alberto Chicote se ha convertido en uno de los chefs más reconocidos de la televisión española de los últimos tiempos. Sus agudas críticas le han brindado una imagen de hombre rudo. Pero como suele suceder, las apariencias engañan.

Antes de convertirse en uno de los favoritos de los televidentes, el juez de 'Top Chef España' jugó rugby junto a Javier Bardem y, como muchos, también sufrió por un amor que lo abandonó.

DE LA CANCHA A LA COCINA

Desde los 17 años Chicote ha estado dedicado al mundo gastronómico, pero la cocina le ha permitido foguearse en otros ámbitos. Incluso hubo una época en la que coincidió con el esposo de Penélope Cruz en la selección madrileña de rugby.

"Él era pilier, jugaba de '3', se ponía a mi derecha. Lo pasamos. Me acuerdo mucho de él, pero no nos hemos vuelto a ver", rememoró Alberto en una entrevista que le brindó a Marca hace algunos años, según reseñó Vanitatis.

DIRECTO Y SENSIBLE

En 2012 el cocinero se hizo famoso en la televisión por su contundente trabajo en 'Pesadilla en la cocina', donde dejó en evidencia los desastres que yacían en el interior de restaurantes en crisis, tal y como lo hizo Gordon Ramsay en la versión americana del programa.

Más allá de su filoso carácter, Chicote ha reconocido abiertamente que se le da muy fácil llorar, especialmente si es por un desamor.

SU MOMENTO MÁS DURO

Si bien tuvo un divorcio amistoso con la madre de su hijo, el momento más duro de su vida llegó de la mano de otra chica que sin decir más pasó la página, dejándolo a él enterrado en el pasado.

"Cuando peor lo he pasado fue cuando una persona me abandonó sin dar una explicación. Desapareció sin decir nada después de tres o cuatro años de relación, eso me dolió muchísimo", comentó el chef en una entrevista con La gaceta de Salamanca.

EL SOL SIEMPRE VUELVE A SALIR

En esa misma conversación, el dueño de Yakitoro reveló que pudo superar esa ruptura luego de llorar largo y tendido mientras tomaba un café en su restaurante, y que esta no fue la primera que vez que había echado una lagrimita en su lugar de trabajo.

Habiendo dejado el malestar atrás, Alberto tuvo la suerte de encontrarse con la mujer que hoy es su compañera de trabajo y de vida, Inma Núñez.

SON TAL PARA CUAL

La directora y jefa de sala de Yakitoro es el complemento perfecto del cocinero, quien le adjudica a ella gran parte de su éxito en el negocio de la hostelería.

"Tengo a alguien que es capaz de hacer las cosas como yo sin necesidad de que tenga que estar presente. Hay que tener una estructura fuerte como somos nosotros dos. La confianza es absoluta", dijo el chef en 'Pesadilla en la cocina', informó Vanitatis.

No cabe duda que a pesar de su actitud estricta y llena de honestidad, Chicote deja en evidencia que así como lo cortés no quita lo valiente, lo rudo no quita lo sensible.