Niño de 4 años amaba tanto a su mascota que decidió abrazarla mientras dormía, pero era un pez
Un niño de 4 años aprendió una importante lección de vida tras haber dormido abrazado con su pez Nemo.
Everett Hamlin se llevó una gran sorpresa cuando se despertó y descubrió que su adorada mascota estaba muerta.
Su confusión era evidente, ya que horas antes se había acostado con él para dormir juntos. Su madre tuvo que explicarle que los peces necesitaban agua para sobrevivir. El pequeño no se dio cuenta de las repercusiones de sus acciones.
Tori Hamlin, la madre de Everett, acudió a Facebook en 2019 para relatar la experiencia educativa de su hijo. Contó que ella y su esposo arroparon a su hijo esa noche y se fueron a la sala para ver una película.
Al poco tiempo escucharon un sonido procedente de la habitación del niño. Cuando le preguntaron que si todo estaba bien, Everett confirmó que el sonido procedía de su cajón, y los padres no le dieron importancia.
Minutos después, Tori pasó por delante de la habitación de su hijo y decidió comprobar cómo estaba. Para su sorpresa, encontró una silla contra la pared y se percató de que la pecera no estaba tapada.
La madre se dio cuenta de que el pez había desaparecido, por lo que llamó a su marido. Los padres buscaron a Nemo por toda la habitación. Finalmente, lo encontraron acunado cariñosamente entre las palmas de las manos del niño, cerca de su adorable cara mientras yacía profundamente dormido.
Lamentablemente, Nemo no sobrevivió, ya que era demasiado tarde él. A Everett le costó creer que había abrazado a su querida mascota hasta la muerte en un intento de demostrarle su amor.
“¡¡¡Everett ha tenido este pez casi toda su vida!!! Ahora está molesto [porque] lo mató y dijo que solo quería acariciarlo. Que Dios me ayude!”, comentó Tori.
La publicación obtuvo más de 26 mil “me gusta” y fue compartido cientos de veces, haciendo que el pequeño se volviera viral.
El tierno gesto de amor de Everett dejó a muchos perplejos ante su inocencia, captando el corazón de miles de personas.
Un usuario de Facebook escribió: “Aww, ese pobre bebé y el pez. No lo sabía. No tenía intención de hacerlo. Pobrecitos”.
Varios internautas admitieron que cometieron errores similares cuando eran niños, lo que les costó la vida de muchas pequeñas mascotas. Uno bromeó: “Al menos mató a los suyos de forma tierna”.
Algunas personas les suplicaron a los padres que le consiguieran al niño de 4 años un sustituto para aliviar su tristeza.
Muchos se ofrecieron a asumir la responsabilidad de adquirir un nuevo pez para el niño, pero sus padres, Tori y Corey, rechazaron todas las ofertas monetarias.
Finalmente, llevaron al pequeño a una tienda de animales y le dejaron elegir el pez que quería, con la promesa de no tocarlo nunca. Aunque toda la experiencia dejó al pequeño devastado, Tori se alegró de que tuviera la oportunidad de recibir un aprendizaje tan valioso.
Ella dijo: “Everett tiene que hacer cosas así para aprender. No todos los niños escuchan a sus padres y aprenden de ello. A veces tienen que cometer errores y aprender. Es parte de la crianza y del crecimiento”.
Desde entonces, el joven se ha adaptado a la vida con su nuevo pez de colores, totalmente equipado con los conocimientos necesarios para criar uno con seguridad.
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