Perro que vivió encadenado por 8 años e inmerso en tristeza y dolor recibe caricia por primera vez

Durante ocho largos años, este perro llamado Bron vivió en un mundo dominado por la tristeza y el dolor, pero en un instante, todo cambió.

Bron vivía encadenado en una granja en España. Al ser descubierto por voluntarios de Rescate Animal, el cuerpo debilitado del perro mostraba lesiones no tratadas, indicios de abuso y negligencia. The Dodo tiene su historia.

Sin embargo, sus heridas invisibles eran las peores. Nunca había sido amado, ni recibió cariño, por lo que al sentir sus primeras caricias, su reacción fue increíble.

"Bron es uno de los casos más difíciles que hemos encontrado", dijo la rescatista Pilar Delgado a The Dodo.

Mira el video sobre el rescate de Bron.

"Cuando nos acercamos por primera vez, él huía gruñendo".

Incluso cuando fue llevado a un lugar seguro, Bron tardó en bajar la guardia, pero los rescatistas nunca dejaron de intentar ganarse su confianza, y su persistencia dio sus frutos.

En un momento tierno capturado en video, Bron finalmente se dejó acariciar por lo que pudo haber sido la primera vez en su vida.

Esa primera experiencia de calidez y afecto humano fue una revelación bienvenida para Bron, pero ayudarlo a superar los años de trauma ha sido un camino aún más largo. Durante la mayor parte del año, ha estado trabajando con un entrenador de perros experto para prepararlo para un hogar para siempre.

"Es un perro feliz, pero todavía tiene barreras que superar", dijo Delgado a The Dodo. "El corazón de Bron todavía espera que, a pesar de todas las dificultades, pueda vivir sus días con una familia".

Tristemente, luego de la publicación de The Dodo, solo unas semanas después, Rescate Animal España informó que Bron había fallecido.

"Vino a nosotros después de 8 años encadenado, después de mucho sufrimiento. Nos costó ganar su confianza. Él era nuestro gruñón, nuestro desafío, nuestro amigo. Estaba aprendiendo a vivir, a confiar, a ser feliz, con educación especial, porque su caso era difícil, pero nuestra determinación de encontrar una familia y recuperarnos por completo fue mayor"...

"Su corazón decidió dejar de latir una noche de verano, y aquí estamos, sin él. Pero su memoria, su esencia, permanecerá viva entre nosotros. Hasta siempre, mi amigo, nunca olvidaremos tu mirada", escribió la institución protectora de animales.

Mientras estuvo luchando por encontrar la confianza que necesitaba tener de los humanos, Bron tenía padrinos que costeban sus tratamientos, personas convencidas de que el perro debía tener otra oportunidad junto a una familia que lo amara, según publicó La Voz de La Madre Tierra.

Es una pena que el pobre perrito no pudo llegar a conocer el verdadero calor de hogar, aunque en Rescate Animal, le brindaron todas las comodidades y atenciones que necesitaba.