He odiado a mi esposo por años

Una lectora nos ha enviado la siguiente historia, solicitando algo de guía. ¿Tienes algún consejo?

Querida AmoMama,

He odiado a mi esposo por años.

Nos conocimos en 1993. Alex era mayor que yo, él tenía 27 años de edad y yo 21 en ese entonces. Un par de años pasaron y me propuso matrimonio. Entonces tuvimos dos hermosas hijas. Por muchos años fuimos felices y todo estaba bien.

Sin embargo, con el tiempo, cosas comenzaron a cambiar; mi esposo se me hizo tan aburrido como la mesa en medio de la sala. Sus fallas comenzaron a molestarme y comencé a odiarlo. Él nunca lavaba los platos cuando le pedía que lo hiciera y me hacía sentir celosa que saliera con sus amigos a ver el SuperBowl.

Comencé a pensar que él no me daba suficiente tiempo y atención. Quería entender que le había pasado a nuestra relación. Hablé de la situación con mis amigos y mi madre, pero no encontré una respuesta. Tal vez simplemente me aburrí luego del nacimiento de mis hijas. No tenía trabajo, y pasaba todo mi tiempo en la casa. Ya no estoy segura.

Siempre peleaba con él por todo, sin embargo, Alex parecía amarme como el primer día que nos conocimos. Él tenía una tradición: cada vez que se iba de casa temprano en la mañana, y yo estaba durmiendo, me dejaba una nota. Un día, se fue a Dallas en un viaje de negocios.

Entonces desperté y encontré una nota que decía "Volveré pronto, mi corazón se queda aquí contigo, Catherine". Ese mismo día, Alex tuvo un accidente automovilístico y murió. Él se comprometió a volver, pero no hizo. Cada día recuerdo la nota como con memoria fotográfica.

Sin embargo, no tengo la nota conmigo. La boté con cáscaras de banana y un paquete de cereal. Estuve buscandola entre los recipiented de basura, pero no la encontré. Ahí fue cuando me di cuenta de lo mucho que lo amaba. Y aquí estaba yo, pensando que él era cualquier mueble de la casa.

Él no era simplemente una mesa, era mi vida entera. Y todas esas cosas que me hicieron odiarlo mucho, resultaron ser nada, solo cosas insignificanetes. Ya no importa. No hay nada que pueda hacer al respecto, Alex ya no está conmigo. Y ahora me pregunto,cuántas veces le dije "Te amo, mi vida" en este año.

Han pasado seis meses desde su muerte, y me encuentro llorando sola casi todas las noches. Me siento avergonzada de no haberlo valorado lo suficiente, y de no ser capaz de retribuirle esa misma cantidad de amor y afecto que él me dio.

Después de todo, este es mi consejo: aprecia lo que tienes, no dejes que los problemas del día a dia y de la rutina se conviertan en un conflicto. Disfruta cada día rodeada de gente que amas porque ellos son el significado principal de la vide feliz.

De cualquier manera, no he podido hallar calma en ese consejo cuando se trata de mi propia vida. ¿Cómo sobrevivo a esto? ¿Qué debería hacer con mi vida? ¿Ha pasado alguien por algo así? ¿Puede alguien ayudarme?

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