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Joven paralizado tiene visión celestial y conoce parientes muertos que nunca antes había conocido

Estudiante de Godwin paralizado en un choque declara que el cielo es real y que sigue vivo por una razón.

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Un joven estudiante de Godwin recibe todo el apoyo necesario después de quedar paralizado en un trágico accidente automovilístico cuando iba en camino a la escuela.

Ryan Estrada, de 16 años, perdió totalmente el control de su vehículo al intentar de evitar a un ciclista en Gayton Road en el Condado de Henrico.

"Recuerdo que pasé por delante del motorista y había otro automóvil entrando en el carril, así que tuve que desviarme de nuevo a mi carril", recuerda Estrada. "Recuerdo haber perdido el control de la rueda, golpear el buzón y luego golpear el árbol" comentó el chico

Fuente: Facebook / Mason's Toy Box

Fuente: Facebook / Mason's Toy Box

El chico, al narrar su historia, contó que dos automovilistas, a quienes se refiere como sus "ángeles", acudieron a socorrerlo y llamaron al 911. La ayuda no se hizo esperar.

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"Cuando estaba colgando por la ventana, sabía que algo estaba mal porque no podía sentir nada en mis hombros y simplemente no podía sentir nada", dijo Estrada.

Tras el accidente, el adolescente sufrió una fractura de vértebras en el cuello y una lesión grave en la médula espinal que trajo como consecuencia la parálisis de sus manos y piernas.

"Fue fácilmente el peor día de mi vida verlo en la sala de emergencias tan indefenso y llorando", dijo Caroline Estrada, la madre de Ryan.

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Fuente: Freepik

Fuente: Freepik

"Estaban a punto de operarme y todo el día estuve triste, llorando, abatido", comentó Ryan.

"Recuerdo a mi tío, lo vi como en el cielo, y él me dijo que voy a pasar por la cirugía y que todo va a estar bien, así que desde ese momento supe que estaba sonriendo. Miré a mi madre y le dije que todo iba a estar bien. Ya sabes, tío Jack, él me atrapó ".

El joven agregó que también vio a su abuelo, a quien nunca conoció en vida.

"Creo que significa que el cielo es real y que Dios es real y que estoy aquí por una razón. No morí por una razón ", dijo. "Creo que sucedió para recuperar mi fe. No fui realmente una persona religiosa el año pasado cuando pasé por una depresión. Pero desde el accidente paso todos los días rezando ".

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Otra historia igual de sorprendente es la del pequeño Casen Broussard. Poco después de cunplir 2 años su familia recibió una devastadora noticia: A Casen le diagnosticaron un tipo de cáncer infantil llamado neuroblastoma.

Fue una noticia desoladora para los padres hasta que el niño empezó a hablar de Jesús.

Los milagros no solo se presentan en forma de visiones. Un afortunado joven tuvo el honor de convertirse en la primera persona en recuperar la movilidad del torso.

Pudo recuperar el movimiento en toda la parte superior de su cuerpo y extremidades tras un innovador tratamiento con células madre. Los expertos están felices con los resultados.

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