Trágica historia sobre 'Mujeres de consuelo' obligadas a prostituirse en la Segunda Guerra Mundial

Japón obligó a las mujeres de Corea, China y otros países ocupados a convertirse en prostitutas militares entre 1932 y 1945.

Casi cien años han pasado desde que las primeras féminas fueron obligadas a la esclavitud sexual por Japón, pero las historias de las víctimas siguen siendo dolorosas y políticamente divisivas.

Según reportó History, los registros de estos abusos son escasos y hay pocas sobrevivientes, ya que casi el 90 % de las “mujeres de confort” murieron en la guerra.

Decenas de miles de mujeres fueron sometidas a la prostitución forzada por el ejército imperial japonés entre 1932 y 1945.

Los burdeles militares existían en el ejército japonés desde 1932, pero se expandieron enormemente después de la infame “violación de Nanking”.

CÓMO EMPEZARON LOS ABUSOS

El 13 de diciembre de 1937, las tropas japonesas iniciaron una masacre de seis semanas que destruyó la ciudad de Nanking.

Este era uno de los intentos del Japón imperial de apoderarse de la República de China, y las tropas japonesas violaron entre 20.000 y 80.000 mujeres chinas.

Estos abusos horrorizaron al mundo, y el emperador Hirohito temía por el impacto que tuviera en la imagen de Japón.

Por ello Hirohito ordenó a los militares ampliar sus burdeles para garantizar un grupo estable y aislado de prostitutas para satisfacer a los soldados japoneses.

ELLAS ERAN FORZADAS A PROSTITUIRSE

La forma de “reclutamiento” de estas mujeres de confort consistía en secuestrarlas en las calles de los territorios ocupados por Japón.

Algunas también fueron engañadas con supuestos viajes para trabajar como enfermeras o fueron compradas a sus padres como servidoras.

Estas mujeres provenían de todo el sureste de Asia, pero la mayoría eran coreanas o chinas. Una vez en los burdeles, ellas fueron obligadas a tener relaciones forzadas con sus captores.

Los testimonios de las víctimas comparten muchas similitudes: violaciones repetidas, dolor físico agonizante, embarazos y enfermedades de transmisión sexual.

ESTOS HORRORES SIGUIERON LUEGO DE TERMINADA LA GUERRA

El final de la Segunda Guerra Mundial, sin embargo, no acabó con los burdeles militares en Japón. En 2007 se descubrió que las autoridades de Estados Unidos seguían permitiendo estas prácticas.

Estas “estaciones de confort” continuaron funcionando más allá de la guerra, hasta que Douglas MacArthur cerró el sistema en 1946.

En ese entonces, entre 20.000 y 410.000 mujeres habían sido esclavizadas en al menos 125 burdeles militares.

Por otro lado, la ONU estimó que alrededor del 90 % de mujeres de confort habían muerto al final de la guerra.

Pero los funcionarios japoneses destruyeron cualquier evidencia documentada del sistema, por lo que los números se basan en estimaciones de historiadores.

Luego de muchos años sin hablar sobre el tema, el gobierno de Japón finalmente reconoció estas atrocidades en el año 1993.

En Amomama nos unimos a la lucha contra los abusos sexuales e instamos a la población a denunciar cualquier hecho similar.

Además condenamos cualquier tipo de violencia, y esperamos que la difusión de estas historias ayude a crear conciencia sobre el tema.

En el año 2015, Japón anunció que daría una compensación a las “mujeres de confort” coreanas sobrevivientes, pero Corea del Sur solicitó una disculpa más fuerte.

Japón condenó dicha solicitud por parte del gobierno surcoreano, demostrando que este tema sigue siendo un problema de las relaciones exteriores entre ambos países.

Por otro lado, unas pocas docenas de mujeres víctimas de estos abusos siguen vivas. Una de ellas es Yong Soo Lee, que ha expresado su deseo de recibir una disculpa del gobierno japonés.

Ella también dijo que nunca quiso dar consuelo a esos hombres y que jamás podrá perdonar lo que le sucedió.