El "Hombre Araña" de Zaragoza trepó un edificio para salvar a mujer siendo atacada
La desesperada mujer se asomó por la ventana para gritar pidiendo auxilio, y el valiente sujeto inmediatamente comenzó a trepar la edificación.
Recientemente, una preocupante situación mantuvo en vilo a un vecindario de Zaragoza, luego de que una mujer gritando a todo pulmón alertara a todos de la peligrosa situación en la que se encontraba.
Un joven musulmán de 22 años de edad llamado Mohamed Karzazi supo que era su momento de entrar en acción. Y fue gracias a su valentía y arrojo que las cosas no terminaron en una tragedia.
Todo comenzó cuando una mujer se asomó a la ventana del primer piso y comenzó a gritar pidiendo auxilio. Unos 20 vecinos se reunieron en la calle, y varios se pusieron en contacto con los servicios de emergencia.
Según detallaron los testigos a El Heraldo, la pareja de la mujer le llegó por detrás y la jaloneó por la fuerza hacia el interior del departamento. Varios aseguran que usó la cuerda de la persiana atada alrededor del cuello de la mujer para hacerlo, casi matándola en el proceso.
La mujer no paraba de llorar, corriendo a la ventana de nuevo y aparentemente dispuesta a saltar. Fue entonces cuando Mohamed oyó el ruido y de inmediato comenzó a trepar el edificio, y "parecía Spiderman", relatan los vecinos.
Mohamed llegó a la ventana, donde evitó que la mujer saltara y entró en la residencia. Permaneció junto a ella casi media hora, esperando a elementos de la policía, quienes calmaron la riña doméstica rápidamente.
"A él lo conozco de coincidir en algún bar y en ningún momento ha tratado de atacarme", dijo Mohamed de la pareja de la mujer, agregando que "decía que no le había hecho nada a la chica, que había sido una discusión por los niños".
La pareja compartía el apartamento desde hacía más de un año, y según los vecinos, jamás habían sido una familia problemática. El hombre fue llevado a la comisaría por la policía, mientras que una ambulancia se llevó a la mujer a un hospital.
Pero lo peor de todo fue la recompensa que recibió Mohamed por su generosidad. Al escalar el edificio, arrojó al suelo su chaqueta. Al volver por ella, comprobó que alguien la había revisado, hallado su cartera y hurtado la misma.
"Siempre que hago algo bueno me pasa a mí algo malo. Me pasaré también por el hospital, porque me ha salido un moratón en el hombro al tirar de la chica", detalló el héroe.
En otro caso similar, Mamadou Gassama pasaba por un vecindario al norte de París, camiino a ver la final de la Champions League entre Real Madrid y Liverpool por televisión.
Pasando por la Rue Marx-Donnoy, vio una multitud formada mirando hacia arriba, a un edificio residencial.
Todos miraban a un pequeño niño colgando del borde de un balcón del cuarto piso, a veces, colgando de sólo una mano. Y Gassama supo exactamente qué es lo que debía hacer.
Y no son sólo personas quienes necesitan ser salvadas de situaciones como éstas. Una pobre perra encadenada fue abandonada colgando de un balcón por 5 horas recientemente.
Dejar a un perro en un tercer piso, amarrado y privado de su libertad, debe ser una verdadera agonía. Pero cuando la pobre Bella cayó del balcón, su muerte estaba casi asegurada, de no haber sido por valientes héroes que entraron en acción.