20 familias rechazaron a la bebé con Síndrome de Down, hasta que un amoroso padre decide adoptarla
Un hombre en Italia adoptó una niña con síndrome de Down. La pequeña fue rechazada por más de 20 familias.
Un hombre de 41 años llamado Luca Trapanese ha conmovido a los usuarios de las redes sociales por desafiar los estereotipos sobre la paternidad. Trapanese es homosexual, católico y soltero, pero eso no le impidió adoptar a una adorable niña con síndrome de Down.
La niña había sido rechazada por más de 20 familias cuando apenas contaba con un mes de edad, todo apuntaba a que la pequeña tendría una vida dificil. La historia de Alba y Luca ha sido una sensación en los medios de comunicación en Europa y el resto del mundo.
Alba fue abandonada al nacer por sus padres biológicos debido a su condición. Luca trabajó durante años como voluntario en la Iglesia Católica de Nápoles ayudando a personas discapacitadas.
Trapanese tenía 14 años cuando descubrió que su mejor amigo tenía cáncer terminal. Él quedó marcado con un profundo sentido de lo que era vivir con una enfermedad.
Luca contó en su libro "Nata Per Te" (Nacida para ti), que a los 25 años descubrió que deseaba ayudar a otros. Entró a un seminario para convertirse en sacerdote, hasta que el amor lo hizo desistir de esa idea.
Después de dos años en el seminario, se enamoró de un hombre que conoció allí. Vivieron juntos durante 11 años.
Con su pareja fundó una organización en Nápoles que ayuda a las personas con discapacidades. Luca relata:
"Mi pareja y yo siempre hablamos de adoptar y acordamos que adoptaríamos a un niño con discapacidades. Desafortunadamente, rompimos hace unos años y me mudé solo. Fue un desafío porque todavía quería ser padre. Pero en ese momento, en Italia, no era posible que un padre soltero adoptara. Luego las cosas cambiaron y, en 2017, pude solicitar la adopción".
Luca recibió una llamada de la corte en julio del año pasado. Le comunicaron que tenían a una niña con síndrome de Down llamada Alba, y que había sido rechazada múltiples veces. Trapanese cuenta que sintió inmediatamente que se trataba de su hija y corrió al hospital.
"Me dijeron que sólo tendría la oportunidad de tener un hijo con problemas que nadie más quería. No tenía ninguna duda al respecto y dije que no tenía problemas para adoptar a nadie. Debido a mi experiencia personal, sabía que tenía las herramientas para lidiar con cualquier problema que un niño pudiera tener", continúa.
El año pasado, Luca pudo conocer a su hija y cargarla en sus brazos. Alba era una bebita hermosa de 18 meses, pelo rubio y bellos ojos azules. Hoy en día, ambos son inseparables y comparten un vínculo muy especial. La cuenta de Instragram de Luca está repleta de fotos de los dos.
Esta historia es similar a la de Kecia Cox, de 27 años, no creía estar "en riesgo" de tener un bebé con síndrome de Down. Su tercera hija, Bree, nació por cesárea. Los médicos le dieron la "mala" noticia: "Creemos que su bebé tiene síndrome de Down".
Cuando Bree tenía 2 años, la pareja decidió ntentar tener otro bebé, pero sufrió dos abortos. “Fue mi tercer aborto involuntario y quería desesperadamente otro hijo. Tenía el corazón roto y me sentía muy perdida y sola”.
Después supo que una niña de 4 años con síndrome de de Down esperaba adopción en un orfanato en Ucrania. Kecia supo que debía adoptarla.