Hombre graba conmovedoras dificultades de anciana que no puede costear silla de ruedas eléctrica

La historia de una mujer retirada oriunda de Inglaterra fue compartida en las redes, derritiendo el corazón de miles y llevándolos a recaudar fondos para comprarle una nueva silla de ruedas.

Alan Bas notó a una anciana caminando con una andadera en la calle Stevenage, y decidió ponerse a filmar. La mujer, cuyo nombre es Molly, le contó un poco sobre su desafortunada situación.

Molly trabajó durante décadas, hasta cumplir los 71 años. Ahora, su pensión mensual financia su vida y gastos cotidianos. Pero no es ni de lejos lo suficiente como para vivir con comodidad.

Como explica Molly:

"Dicen que tengo suficiente para vivir, pero no considero tenerlo. Tengo la mitad de la subvención de £69 (90 dólares)... y recibo una pensión de vejez de £139 (280 dólares), y trabajé hasta los 71 años".

El bajo estipendio mensual implica que Molly no puede costearse una silla eléctrica. Dijo que ellos le "dan una subvención de asistencia, pero la cortaron a la mitad".

Insistió además:

"No entiendo. No me entra mucho, se los aseguro". Bas le creyó. Y muchos en Facebook también le creyeron, compartiendo su historia hasta hacerla viral. Bas dijo en su publicación:

"Ella no puede costearlo y lucha a diario para funcionar desde A hasta B. ¿Podrían por favor hacer esto viral? Para que algún ministro local posiblemente coordine lol que debió hacerse hace muchos años"

Shane Yerrell respondió al llamado. Organizó una página de recaudación de fondos. Hasta ahora ha recaudado £560 (722 dólares) de su meta de £2000 (2600 dólares). Las sillas eléctricas cuestan desde £400 (515 dólares) hasta más de £5.000 (6500 dólares), según fuentes oficiales.

Yerrell regularmente participa en proyectos como este. Su ONG, "Through The Fight", ha recaudado más de £40.000 en ayuda para extraños. Dijo que:

"He ayudado a ancianos que han sido atacados, y ella me parece muy dulce. Realmente no me gusta ver a nadie pasando penurias".

Otra mujer en dificultades es Bethany Bright, de apenas 22 años. Bright perdió una de sus piernas en un accidente en junio de 2016. La persona que la arrolló fue atrapada y sentenciada. Bright recibió una silla especial para poder movilizarse, pero ahora, la obligan a regresarlo.

Las autoridades dicen que su subvención por discapacidad fue reducida. Bright tendrá que comenzar toda una querella con las autoridades, con la esperanza de que se le permita quedarse con su silla.

En otro caso que demuestra las virtudes de la humanidad ante las dicultades ajenas, un extraño se hizo viral luego de empujar a una discapacitada por media hora para llevarla a casa tras dañarse su silla de ruedas.

Un hombre que empujó a una mujer discapacitada luego de que su silla de ruedas se descompuso ha sido elogiado por su compasión.

Según reporta Yahoo Lifestyle, Bilal Quintyne, de 24 años, oriundo de Smyrna, Georgia, recientemente iba a trotar con un amigo cuando vio a una mujer en su silla de ruedas eléctrica, varada a un lado del camino. El motor de su silla se había descompuesto, con una rueda en la acera y la otra en pleno pavimento.

"Me preguntó que si podía pedir ayuda y yo dije, estoy en buena forma. ¿Dónde queda su casa? Yo mismo la llevaré", dijo Quintyne, boxeador amateur, a Yahoo Lifestyle. El joven se quitó la camisa y comenzó a empujar a la mujer por la vía, bajo un intenso calor que superaba los 32 grados.