Mujer tuvo dos bebés tras médicos decir que su inusual cáncer de huesos le impediría ser mamá

A una mujer que le dijeron que su devastador diagnóstico de cáncer implicaba que tenía cero probabilidades de tener hijos ahora es mamá a tiempo completo.

Cara Newton milagrosamente quedó embarazada dos veces después de que le dijeran que jamás podría concebir. Ahora sirve de ejemplo para otros jóvenes que combaten la infertilidad, un símbolo de que no deben perder la esperanza.

La mujer de 36 años, oriunda de Fleet, Hampshire, dijo que "cuando veo a nuestros niños, tengo que pellizcarme para comprobar q ue sí son nuestros, es un sueño hecho realidad, nunca pensé que pasaría tras mi diagnóstico de cáncer".

Cara fue diagnosticada de sarcoma de Ewing, un raro tipo de cáncer óseo, en el 2009, tras pensar en un principio que se había desgarrado un músculo de la pierna izquierda.

Desesperada por algún día tener su propia familia, pidió a los doctores congelar sus óvulos antes de someterse a la quimioterapia, pero su solicitud fue rechazada.

El cáncer de Cara era agresivo, y sin tratamiento inmediato, se arriesgaba a que la enfermedad se propagase por su cuerpo. Tras comenzar su tratamiento la semana siguiente, Cara se sometió a 12 meses de demoledoras sesiones de quimioterapia, detonando una menopausia temprana.

En un intento por evitar amputarle la pierna, los cirujanos extrajeron el hueso afectado por el cáncer en su pierna superior, reemplazándolo por una prótesis metálica.

Pero devastadoras noticias la esperaban, pues ahora, la fertilización in vitro no era una opción. Tenía 0% de probabilidades que alguna vez concebir un hijo, con o sin tratamientos de fertilidad.

Negándose a perder la esperanza, tres años después, habiendo finalizado la quimioterapia, Cara y su marido, Chris, milagrosamente lograron quedar embarazados de Sebastian, que ahora tiene cinco años. Al poco tiempo tuvieron una hija, Jessica, de 2 años.

Cara, ahora madre a tiempo completo, dijo: "me enfrenté a la menopausia a los 26 años, mis óvulos habían sido destruídos por la quimioterapia. Que te den 0% de probabilidad fue una pesadilla, pero ahora me gusta pensar que nuestra travesía puede darle algo de esperanza a otras jóvenes mujeres que enfrentan infertilidad tras el cáncer".

Cara y su marido, Chris, de 38 años, tuvieron otro susto por cáncer en enero de 2016, 20 meses después del parto de Sebastian, cuando Cara encontró un bulto en su pierna izquierda.

Cara recordó entre lágrimas que "estuve devastada cuando apareció el bulto, de una vez pensé que el cáncer había vuelto y que Seb se quedaría sin mamá. No podía imaginar tener que enfrentarme a la quimioterapia por segunda vez".

"Pero tras dos biopsias y una agonizante espera de cuatro semanas por los resultados, nos dijeron que la masa no era maligna. Los doctores luego descubrieron que mi cuerpo rechazaba la varilla de metal, causando un tumor lleno de fluido, fue un alivio pero la felicidad fue breve, porque sabía que necesitaría otra operación para corregirlo."

A la pareja le dijeron que intentar tener un segundo bebé no sería peligroso a pesar del rechazo de su cuerpo a la prótesis metálica.

Comenzaron a intentar de nuevo en abril de 2016. "Ya habíamos sido bendecidos con nuestro perfecto Seb, pero queríamos que tuviese un hermanito. Los doctores no tenían idea de si tendría la suerte de quedar embarazada de nuevo naturalmente, ya estaban atónitos porque hubiera concebido a Seb, sólo había tenía un período desde el 2009".

"Pero estuvimos extasiados cuando volvimos a quedar embarazados de Jessica apenas semanas después."

Jessica nació el 27 de enero de 2017, y Cara lo considera un "milagro", pues tenían ahora "uno de cada uno" (un niño y una niña).

"Sentimos que nuestra familia finalmente estaba completa a pesar de todas las probabilidades estar en contra de nosotros. Fue todo un milagro."

La nuevo prótesis de Cara fue insertada el pasado mes de enero, y será monitoreada de cerca, en caso de que su cuerpo vuelva a rechazarla.

Agregó que "quizás necesite que me amputen la pierna izquierda en el futuro, pero por ahora, disfruto ser una mamá a tiempo completo. Hemos luchado mucho por nuestra pequeña familia, antes de quedar embarazada de Seb tuve que dejar mis antibióticos fuertes, que fue un riesgo enorme porque pude perder la pierna de una infección".

"Pero fue un riesgo que estaba dispuesta a tomar, y por fortuna, valió la pena."

Hay veces que los doctores simplemente se equivocan en sus predicciones. Según los doctores, a Jo Kelly le quedaban apenas semanas de vida por delante, y ella sabía que casarse con el hombre que adoraba sería su último regalo de amor. Ella y Pete Ames llevaban apenas seis meses de relación en ese entonces, pero ambos sabían que habían encontrado a su otra mitad.

Pero ocho años después, sigue demostrando a los médicos lo equivocados que estaban.