Jaime de Mora y Aragón: la vida llena de lujo y fiestas del famoso aristócrata
Nacido en el seno de una familia aristocrática de Madrid, Jaime de Mora y Aragón llevó una vida divertida e intensa, que provocó que fuese considerado persona no grata en el reino de los belgas.
Don Jaime fue todo un personaje polifacético con una extraordinaria personalidad y un carisma único, que hizo que su popularidad trascendiera las fronteras españolas, convirtiéndose en embajador y promotor del turismo en la Costa del Sol.
Su aspecto era el de un clásico aristócrata, con el cabello totalmente engominado, bigotes largos y en punta, barba, bastón y un divertido monóculo.
Jaime de Mora y Aragón en entrevista. | Foto: YouTube/fritz51116
ORIGEN NOBLE
Fue el primero de los seis hijos del cuarto marqués de Casa-Riera, Gonzalo de Mora y Fernández, y de Blanca Aragón y Carrillo de Albornoz y nació un 18 de julio del año 1825.
Aunque estudió en los mejores colegios internacionales, nunca le interesaron mucho los estudios formales, aunque sí aprovechó de dominar varios idiomas, que le dieron tantas ventajas como su origen noble.
Jaime de Mora y Aragón en un descapotable en Marbella, 1975. | Foto: YouTube/ai.pictures Español
UN BOHEMIO ARISTOCRATA
A lo largo de su vida fue verdaderamente polifacético, desempeñándose como actor, escritor, boxeador en Argentina, taxista, camarero, pianista, relacionista público, asesor financiero, dueño de locales nocturnos, modelo publicitario y torero ocasional, teniendo éxito relativo en cada uno de ellos.
Entre las obras en que participó están: Las personas decentes me asustan, de Emilio Romero y Psicoanálisis de una boda. Entre sus publicaciones: Blanco y Negro y el libro autobiográfico “Yo”.
Jaime de Mora y Aragón en escena. | Foto: YouTube/ai.pictures Español
Por su naturaleza fiestera y poco convencional, prácticamente fue desheredado por su millonaria familia, aparte de serle vetado el castillo Belga donde vivía su hermana, la reina Fabiola.
También se cuenta a modo de leyenda urbana, que una de las razones por las cuales fue vetado por su hermana, es que ella descubrió que él había cambiado parte de sus joyas por bisutería de imitación, vendiendo o empeñando las originales.
Vittorio de Sica en un restaurat italiano donde Jaime toca la guitarra, Italia 1961. | Foto: Getty Images
"Me acostumbré a los desaires de la familia y decidí que la vida de aristócrata insulso no me gustaba. Además, tenía que buscarme la vida, porque nosotros teníamos blasones, pero no efectivo", explicaba.
Cada 18 de julio organizaba una fiesta monumental por su cumpleaños en la Costa del Sol, lo cual contribuyó en darle al lugar un gran atractivo turístico.
MATRIMONIOS
Su primer matrimonio fue en 1958 con la actriz mexicana Rosita Arena, pero solo estuvieron juntos por dos meses. En 1962, la modelo sueca Margit Ohlson conquistó su corazón, pero se separaron tres veces hasta que finalmente contrajeron matrimonio católico el 18 de marzo de 1978 en Madrid y estuvo con él hasta su muerte.
Jaime de Mora y Aragón y Margit entre amigos en su boda, Madrid 1978 | Foto: YouTube/ai.pictures Español
EPITAFIO
Cuentan los conocidos que él siempre presintió que moriría al llegar a los 70 años, y cumplió su palabra. Murió el 24 de Julio de 1995, apenas unos días después de arribar a las siete décadas de vida.
Su muerte fue atribuida a un infarto al miocardio, y antes de su partida, perdonó a su hermana por no haberlo invitado a su boda real, y solicitó que en su epitafio debían grabaran la frase: “Fui lo que quise, quise lo que fui”.