Erika Buenfil contó cómo la afectaron por las inundaciones
Las copiosas lluvias que han caído en las últimas semanas en México han ocasionado fuertes inundaciones, afectando a muchos hogares. El de la popular actriz fue uno de ellos.
A pesar de lo activa que es a través de las redes sociales, Erika Buenfil no pudo compartir la tragedia que vivió recientemente, cuando la calle donde vive sufrió una severa inundación que causó importantes daños en su hogar.
"Se me inundó mi sótano horrible. Llegó el agua hasta las rodillas. Fue un show", contó Erika a los reporteros.
Apenas se vio en el medio de tan dramática situación, la actriz de 55 años quiso hacer una grabación en vivo mostrando el agua que ingresaba a raudales a su casa, pero su hijo de 15 años le hizo ver que no era prudente hacerlo.
Entonces, ante la dificultad de recibir apoyo de los bomberos, a quienes les resultaba imposible ingresar al lugar debido a que la calle parecía un río caudaloso, Buenfil decidió comunicarse por vía telefónica con Fernanda Familiar, quien respondió de inmediato enviando a personas que la ayudaran.
“El agua se fue yendo sola. Lloré mucho, fue doloroso, se perdieron cosas, pero todo se recupera, lo material se recupera. Nosotros estamos bien", dijo la popular artista.
Algunos vecinos de la misma calle llegaron a perder sus vehículos, pero por suerte los de Erika se salvaron de ser arrastrados por las fuertes corrientes de agua.
Según explicó Erika, las mayores pérdidas que sufrió su casa se localizaron en el sótano, donde había hecho una gran remodelación, convirtiéndolo en un gimnasio. Los equipos y todo lo que había allí se dañó irreversiblemente.
Y aunque ya ha recibido algunos presupuestos para reparar los daños y realizar una nueva remodelación, la actriz dice que por ahora no se siente cómoda contratando personal por el tema del coronavirus.
De momento, Buenfil y su hijo se encargaron de secar la humedad y limpiaron lo mejor posible el área, en espera de que pase la situación con la pandemia. A la actriz le asusta que ingresen a su hogar personas que pudieran poner en peligro su salud y la de su familia.