Atletas llaman “broma de mal gusto” a la participación de deportista transgénero en los JJOO

Una mujer transgénero que representará a Nueva Zelanda en los Juegos Olímpicos ha sido criticada por algunas figuras del deporte en la nación oceánica.

En AmoMama, te hemos hablado ya de las luchas de las personas transgénero por ser aceptadas y reconocidas. Recientemente, te contamos la historia del padre que se hizo viral por su emotivo discurso en defensa de su hija trans.

Pero el caso que te traemos el día de hoy ha generado mucha controversia en Nueva Zelanda. Se trata de Laurel Hubbard, una atleta transgénero que forma parte de la selección olímpica de levantamiento de pesas.

Hubbard comenzó a levantar pesas en su juventud, y batió récords juveniles. En 2001, dejó el deporte por varias razones, y comenzó su transición de género con tratamiento hormonal en 2012.

En 2017, a los 39 años, Hubbard decidió volver a levantar pesas de forma competitiva. Llegó a participar en los Juegos de la Mancomunidad de 2018, pero una lesión de codo la sacó de la competencia y casi la obliga a retirarse.

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Luego de un año, Laurel se recuperó y volvió a entrenar. Logró clasificar para los Juegos Olímpicos de Tokio de 2021. El equipo de levantamiento de pesas de Nueva Zelanda la considera uno de sus mejores prospectos.

Sin embargo, la participación de Hubbard ha causado controversia en algunos sectores del deporte neozelandés. Para competir como mujer, las regulaciones exigen que el nivel de testosterona de Hubbard no supere cierto umbral.

Sin embargo, algunas personas afirman que las mujeres tienen niveles mínimos de testosterona, muy por debajo de los niveles de Hubbard. Por eso, dicen que la regulación es injusta.

La ex atleta Tracey Lambrechs argumenta que haber tenido la testosterona de un hombre por 35 años es una gran ventaja. "Que compita con alguien que ha tenido quizás una décima de esa testosterona no tiene sentido", dijo Tracey, según recoge TVNZ.

La atleta belga Anna Van Bellinghen también cuestionó la situación. Van Bellinghen probablemente deba competir con Hubbard en su misma categoría.

"Entiendo que para las autoridades no es tan simple como seguir el sentido común, y que hay muchos detalles poco prácticos con eventos tan inusuales como este, pero para los atletas todo se siente como una broma de mal gusto", dijo en entrevista con InsideTheGames.