Era un armario simple. Pero mamá hizo una habitación secreta para su hija en el interior

Para los adolescentes es muy importante tener su propia habitación. ¿Adónde más puedes ir cuando te sientes triste, solo, o simplemente quieres relajarte y olvidarte del mundo?

Parece que los jóvenes siempre están buscando un espacio personal para esconderse. Pero, ¿qué pasaría si un niño no tuviera ese espacio personal?

Bueno, una madre de nombre Laura Medicus sabía lo que era eso para su hija y estaba decidida a darle un poco más de espacio, convirtiendo su armario en algo bastante mágico.

Con ese fin, reportó Lifebuzz, se embarcó en un proyecto de construcción de bricolaje que le merecería el premio de madre del año.

Medicus sabía lo que era ser hija única y extremadamente introvertida mientras crecía.

Su hija, Sylvia, era básicamente un reflejo de ella cuando era adolescente. Ella prefería mantenerse oculta del mundo cuando no estaba en la escuela.

Desafortunadamente, la pobre Sylvia no tenía un espacio en el armario para esconderse.

La madre de Sylvia, Laura, sabía que su hija crecería y se vería obligada a vivir en el mundo real.

Por ahora, Sylvia necesitaba un lugar que estuviera oculto para poder reflexionar libremente y lejos de las proximidades de su madre y de cualquier otra persona que pudiera estar pasando por allí.

Entonces, a Laura se le ocurrió la solución perfecta. Le contó a Sylvia sobre el concepto de crear una habitación secreta dentro de su armario y la chica se emocionó mucho.

Al darse cuenta de que no había marcha atrás, le contó a su esposo lo que había planeado para crear este espacio personal mágico y misterioso, y después de insistir un poco, finalmente él cedió y la ayudó a construirlo.

Mira el ingenioso proyecto en el siguiente video:

Laura y su esposo cerraron el armario de su dormitorio y crearon una abertura para la habitación de Sylvia.

El adolescente tenía un closet junto a la puerta porque la casa, que se construyó en 1938, no tenía un armario empotrado.

La única razón por la que Laura tuvo uno fue porque un propietario anterior renovó su habitación y lo instaló. Ahora su armario serviría como el espacio secreto de su hija.

Laura quitó un trozo de la parte posterior del armario para que su hija pudiera entrar a través de los muebles.

El escaparate estaba anclado a la pared para que no se cayera cuando Sylvia entrara. Tanto la madre como la hija ya estaban entusiasmadas con el proyecto, pues compartían el amor por los lugares escondidos.

Con el nuevo armario abierto, Laura colocó el antiguo guardarropa frente a él. De esta manera, Sylvia obtendría acceso a su lugar secreto a través de su entrada.

Laura estaba muy entusiasmada con el concepto, aunque sabía que la habitación secreta no duraría para siempre. Pero por el momento, cumpliría su propósito de darle a Sylvia su espacio personal.

Los padres estimaban que el espacio secreto sería útil por otros tres años como máximo.

Una vez que Sylvia crezca y supere su espacio personal, Laura cree que tendrá que derribar la pared para hacer que el cuarto de su hija sea un poco más grande. Pero por ahora, Sylvia tendrá su habitación privada y es increíble.

Sylvia definitivamente usa el espacio para lo que originalmente se pretendía, que es almacenar su ropa.

Sin embargo, el espacio se ha vuelto habitable ya que el adolescente ve programas de televisión en su iPad y habla allí con su mejor amiga. Verdaderamente es un sueño hecho realidad para cualquier adolescente y Sylvia está disfrutando cada momento que pasa adentro.