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Mhoni Vidente comparte un ritual simple para conectarse con Dios y sanar cuando estás deprimido

Fabricio Ojeda
06 abr 2018
19:54

La depresión es un trastorno mental que produce profunda tristeza, decaimiento anímico, baja autoestima, pérdida de interés por todo y disminución de las funciones psíquicas.

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Para quienes la sufren resulta difícil salir de ella, y muchas veces deben someterse a costosas terapias y tratamientos con drogas que causan adicción y efectos secundarios, pero existen remedios naturales, o místicos, que según algunos funcionan.

La conocida MhonI Vidente publicó en su página Mhoninoticias una “Receta para la depresión” que a su modo de ver sirve para cuando se está pasando por momentos difíciles.

En un video subido a la plataforma Youtube, la mentalista de origen cubano explica detalladamente la forma como debe realizarse el ritual, que incluye miel de abejas, agua bendita y un salmo de la Biblia.

El procedimiento, explicó Mhoni, es el que sigue:

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“Consigues miel de abeja (original), te metes a bañar y te la pones por todo tu cuerpo, como si fueras a exfoliar tu piel con la miel, como si estuvieras limpiando tu cuerpo. Te quedas así como 3 minutos y para finalizar te enjuagas y quitas todo el exceso de miel, y te bañas como habitualmente lo haces”.

Mira todo el ritual en el video a continuación:

Luego, la persona debe ponerse agua bendita en la frente y rezar el salmo 91, que dice así:

"El que habita al abrigo del Altísimo, morará bajo la sombra del Omnipotente.

Diré yo a Jehová: Esperanza mía, y castillo mío; mi Dios, en quien confiaré.

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El te librará del lazo del cazador, de la peste destructora.

Con sus plumas te cubrirá, y debajo de sus alas estarás seguro;escudo y adarga es su verdad.

No temerás el terror nocturno, ni saeta que vuele de día, ni pestilencia que ande en oscuridad, ni mortandad que en medio del día destruya.

Caerán a tu lado mil, y diez mil a tu diestra; mas a ti no llegará.

Ciertamente con tus ojos mirarás y verás la recompensa de los impíos.

Porque has puesto a Jehová, que es mi esperanza, al Altísimo por tu habitación, no te sobrevendrá mal, ni plaga tocará tu morada.

Pues a sus ángeles mandará acerca de ti, que te guarden en todos tus caminos.

En las manos te llevarán, para que tu pie no tropiece en piedra.

Sobre el león y el áspid pisarás; hollarás al cachorro del león y al dragón.

Por cuanto en mí ha puesto su amor, yo también lo libraré; le pondré en alto, por cuanto ha conocido mi nombre.

Me invocará, y yo le responderé; con él estaré yo en la angustia; lo libraré y le glorificaré.

Lo saciaré de larga vida, y le mostraré mi salvación".

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