
Madre comparte fotografía de su hija con una enfermedad grave que se vuelve viral
La conmovedora imagen ha tocado el corazón de miles.
De acuerdo a lo reseñado por Telemundo el 17 de enero de 2018, Ally Parker tomó una fotografía que reflejó la tragedia familia que enfrentaba, dejando a todos impactados ante tanto dolor.
Aunque muchas veces pensamos que nuestra vida es dura e injusta, hay historias que nos golpean en lo más profundo del alma y nos dejan ver que otros pasan por situaciones mucho más dolorosas e injustas que nosotros.
Ally Parker es una mujer que tuvo que enfrentar el dolor de ver a su pequeña hija de cinco años, llamada Braylynn Lawhon, agonizar a causa de un terrible cáncer, mientras que su padre, Sean Peterson, hacía lo propio a raíz de una enfermedad neuro motora.
La valiente mujer tomó una fotografía de abuelo y nieta en el cuarto de un hospital, mientras la pequeña permanecía acostada y el hombre se encontraba sentando junto a ella con una gran expresión de dolor.
Braylynn fue diagnosticada el 6 de diciembre con un tumor cerebral que fue empeorando con el pasar de los días, hasta dejarla en coma y conectada a soporte vital, mientras que su abuelo Sean había perdido hasta el habla a causa de su enfermedad.
Tanto Ally como el resto de su familia se abocaron a mantener a gusto a la pequeña, manteniéndose al lado de su cama en el hospital para hacer que sus últimos días estuvieran llenos de amor y mimos.
El mundo es un lugar terrible. Tendré que despedirme de mi hija y de mi padre con pocas semanas de diferencia, pero a pesar de todo, sigo esperando un milagro, dijo la desesperada mujer.
La ya mencionada fotografía fue publicada por Ally el 7 de enero de 2018, con la siguiente descripción: “La princesa Braylynn todavía está con nosotros. Su pulso apenas está allí y no podemos sentirlo, pero podemos oírlo con un estetoscopio”.
“Las enfermeras dicen que puede que no llegue a la siguiente hora, pero los milagros aún pueden suceder”.
“He estado junto a su cama la mayor parte del tiempo, un fotógrafo vino por unas horas, nuestro perro Sadie está aquí, y solo estamos esperando que la tía Wu llegue para despedirse”. “Hoy ha sido extremadamente difícil y no tengo idea de cómo voy a manejar las próximas horas. Nadie está manejando esto bien", escribió.
Una noche las enfermeras le colocaron a la pequeña un vestido de Bella, y su madre guardaba las esperanzas de que se despertara y se sorprendiera por haberse convertido en una princesa de la noche a la mañana, pero tristemente eso no llegó a suceder.
La familia pasó sus días esperando un milagro, pero a pesar de mantenerse en oración, también debieron enfrentar la organización de dos funerales.