¡Ten cuidado! Este pequeño insecto mata a cientos de niños y perros

Si bien la mayoría de los insectos son inofensivos, a pesar de que la mayoría de la gente está disgustada con ellos, hay algunos que pueden ser un problema real.

Este parece ser el caso con un insecto particularmente problemático en Texas, y si bien su nombre puede sonar "amigable", lo mejor es mantenerse alejado de él.

Según Goodfullness, se los llama "bichos que besan", pero también se conocen con otro nombre: "The Assassin Bug" (el insecto asesino).

Este minúsculo ser es responsable de la propagación de una enfermedad altamente peligrosa llamada tripanosomiasis americana o "mal de Chagas".

El mismo site reveló que un gran número de perros murió a causa de esta rara enfermedad parasitaria. Solo en Texas, aproximadamente 400 perros perecieron por culpa de esta grave afección.

La enfermedad de Chagas es causada por un parásito conocido como Trypanosoma Cruzi, que porta este insecto y se transmite por sus heces.

El "insecto que besa" se alimenta de sangre, generalmente alrededor de los ojos y la boca de una mascota mientras duerme, y ahí es cuando comienza el horror.

La transmisión ocurre cuando el material fecal se frota en la herida de la picadura o en una membrana mucosa, ojos y boca, ya que los perros también pueden contraer este parásito al comer estos insectos.

La enfermedad de Chagas se conoce comúnmente como el "asesino silencioso" porque es difícil darse cuenta de que la enfermedad está presente hasta sus últimas etapas.

La mayoría de las personas se da cuenta después de que el mal ya atacó los músculos del corazón, causando insuficiencia cardíaca, y en esa etapa ya es demasiado tarde para el tratamiento.

Los síntomas de esta dolencia incluyen hinchazón masiva de los párpados e incluso shock anafiláctico, que puede causar asfixia y finalmente la muerte. Pero primero, estos síntomas pueden ser tan leves como la gripe.

Estos insectos generalmente viven bajo los porches, entre paredes, debajo de rocas o cemento, en áreas boscosas, o en casas para perros al aire libre o corrales de pollos.

Si sospecha que su hijo o perro ha sido mordido por uno de estos bichos, llévelo al hospital lo más rápido posible.